Otro más. Se había liberado la circulación que dejó el primer derrumbe, ahora hubo otro.
Apenas unas horas después de que las autoridades federales confirmaron la habilitación de dos carriles para transitar la carretera libre a Mazatlán en todo su trazo, un nuevo derrumbe se registró a unos metros del ocurrido el sábado pasado.
Fue a la altura del kilómetro 162 donde se reportaron ambos incidentes con la diferencia de que el ocurrido este lunes, bloqueó por completo el tránsito vehicular.
Y es que las decenas de toneladas de roca, desprendidas de una pared de unos 40 metros de altura, invadieron no sólo los dos carriles de circulación, sino el espacio de terreno abierto que existe a un costado de la carretera.
Por fortuna el incidente ocurrió en un momento en el que nadie circulaba por ese punto.
Apenas el sábado las autoridades iniciaron la limpieza de otro derrumbe, en el cual se trabajaron alrededor de 48 horas con maquinaria pasada, removiendo unos 300 metros cúbicos material.
Este lunes, a las 11:00 horas, se había confirmado la reanudación total de tránsito; unas cinco horas después, ocurrió el nuevo incidente.
De acuerdo a la información del Centro Durango de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), se había liberado la obstrucción de rocas que había desde el sábado en el kilómetro 162 de la superficie de rodamiento.