Cientos de laguneros se dieron cita en el Panteón municipal de Torreón para recordar a esas madres de familia que, aunque ya no se encuentran físicamente, viven en los corazones de sus seres queridos.
Esta vez, la tecnología estuvo presente.
Y es que, aunque anteriormente se podría ver a conjuntos norteños, tríos y otros músicos en solitario deleitando a las familias en este día, en esta ocasión sólo una bocina fue suficiente para hacerlo.
Como fue el caso de la familia Ortega, la cual cantó a los pies de la tumba de doña Belén Martínez, melodías como Amor eterno, Dos coronas a mi madre y otras más, para recordar que en vida siempre le gustó la música.
"Somos nietos, bisnietos e hijos los que vinimos a recordarla con música como a ella le gustaba", dijo Belén, su nieta, quien cada año organiza la visita.
Hace cinco años falleció doña Belén, y desde entonces su familia no deja de visitar la que se convirtió en su última morada.
Janet Rosales también estuvo presente en esta fecha tan especial.
Como desde hace 21 años, visitó la tumba de su madre, quien falleció cuando ella tenía tan sólo 13 años de edad.
Aunque ha pasado el tiempo, aseguró que el dolor es el mismo, "creo que cada vez es más, yo creo que uno no va a dejar de ocupar a su mamá, pero, pues así son las decisiones de Dios y, pues adelante".
Acuden al panteón de Torreón en el Día de la Madre
Amenizan con una bocina
Conteo
Según Librado Acosta, director del panteón, hasta el mediodía de ayer se habían contabilizado cerca de mil personas, cifra muy similar a la registrada el año pasado.