El futuro es autónomo y eléctrico

La industria automotriz tiene un ramo sumamente importante dentro de las economías de negocios, empresas y hasta de países. Esta faceta, un tanto desconocida para la mayoría de las personas, no basa sus ventas en diseños elegantes o motores potentes; más bien busca acercarse a sus potenciales clientes a través de funcionalidad. Nos referimos a la división de los vehículos comerciales.

Es un hecho que esta clase de unidades no tienen el "glamour" o roban las cámaras como otros productos automotrices; sin embargo, son igual (o hasta más) importantes, pues de ellos dependen servicios de muchos tipos como paquetería, taxis y transportes, camiones de carga y turismo. Además, este tipo de vehículos tiene implicaciones a muchos niveles, desde microempresas hasta servicios de gobierno.

Debido a esta relevancia, económicamente hablando, las marcas buscan crecer constantemente en las funciones que sus autos pesados ofrecen. Para mostrar sus avances, empresas de todo el mundo se presentan en el Internationale Automobil-Ausstellung (IAA) en Alemania, que es el Auto Show más importante para la exposición de esta clase de unidades.

De forma casi tradicional, el evento se realiza puntualmente cada 12 meses en el país bávaro; esta ocasión fue la edición número 67. Sin embargo, en años impares se hace en Frankfurt con enfoque en los autos de volumen y, en fechas múltiplos de dos, se lleva a cabo en la ciudad de Hannover donde el giro va dirigido totalmente a los vehículos comerciales.

Para este año, se hizo un especial énfasis en camiones y transportes "verdes", es decir, que son movidos por trenes motrices híbridos o totalmente eléctricos. Asimismo, se le dio un espacio muy grande a todas las tecnologías que tuvieran que ver con la conducción autónoma en cualquiera de sus cinco niveles.

Con más de dos mil empresas, start-ups y marcas (que abarcan sectores bastante variados) en exposición, resulta imposible hablar de toda lo mostrado en dicho salón. Sin embargo, te contamos qué presentaron algunas de las firmas más importantes y cuáles son los proyectos más interesantes. Éstos proponen un futuro muy distinto a lo que vemos actualmente en los vehículos comerciales.

Tres apuestas futuristas de Volkswagen. Una de las marcas que más presencia tuvo en este evento fue la firma de Wolfsburgo con su división Nutzfahrzeuge (que literalmente significa vehículos comerciales). Como fabricante de casa y con la cifra de 336 mil vehículos de este tipo entregados en el mundo este año, Volkswagen no se guardó nada e hizo una de las presentaciones que más público reunió.

Para iniciar, Thomas Sedran, presidente del Consejo de Administración de Volkswagen Commercial Vehicles, llegó a la conferencia de manera poco convencional: montado en un triciclo que cargaba una caja. Era la primera revelación, un concepto completamente distinto a cualquier cosa que hayan producido.

Se trató del Cargo e-Bike, un proyecto, que aún está en etapa muy joven, enfocado en la creación de más opciones para la "última milla" (proceso final de una entrega, principalmente en zonas urbanas complicadas por el tránsito). Entre sus características se encuentran un espacio de carga de medio metro cúbico entre sus dos ruedas, capacidad de soporte hasta para 210 kilogramos, con el usuario incluido; y un sistema "pedelec" el cual integra un motor eléctrico de 250 watts y 48 voltios que, junto con el pedaleo, genera una velocidad de hasta 25 km/h.

"Nuestro Cargo e-Bike reúne todas las propiedades conocidas de uso y desplazamiento para hacer un producto perfecto", enfatizó Sedran.

Después de la entrada triunfal, el directivo tomó apenas un pequeño instante para presentar los vehículos que acompañarán al e-Crafter, mostrado hace unos meses por la firma, en la lucha por posicionar los vehículos verdes en la gama comercial. Los ABT e-Caddy y e-Transporter, con una autonomía de 200 a 400 km, estarán enfocados en entregas y recorridos de ciudad y llegarán al mercado en 2019.

Así llegó el turno de mostrar el plato fuerte de la conferencia. Con un semblante de gran emoción y felicidad Thomas Sedran dio la señal para que entrara el Volkswagen Crafter HyMotion, diseñado para distancias más largas. Su principal atributo es estar potenciado por una batería de combustible de hidrógeno.

De inicio, este auto comercial tiene un tanque de hidrógeno de 4.2 kg que le ofrece una autonomía de 350 kilómetros. Gracias a su diseño modular, se puede modificar con tanques más grandes que le ofrecen un rango de 500 km. Sin embargo, la gente de Volkswagen explicó que, debido a la falta de infraestructura, no es posible saber cuándo lo veremos en las calles.

"Aún es un auto conceptual, pero está en una etapa próxima a la producción. Estamos llevando a cabo un análisis intensivo de costos y beneficios para determinar su potencial de mercado. Será una adición beneficiosa a nuestro portafolio de motores que funcionan con gasolina, diésel, gas natural y eléctricos," explicó Heinz-Jürgen Löw, Jefe de Ventas en Volkswagen Commercial Vehicles.

Para concluir, los directivos mostraron un proyecto menos tangible y más futurista. Como parte de la familia I.D. eléctrica, el Buzz Cargo Concept buscará ampliar esta familia hasta los vehículos comerciales. Sin una fecha de producción definida, este modelo está montado en una plataforma MEB (como todos los eléctricos del Grupo), probablemente equipará un sistema de conducción autónoma y la cabina de carga utilizará el internet de las cosas para mantener control de lo que va en la sección de carga. Sin duda Volkswagen está preparado para los retos de movilidad y transporte que se vienen.

Otras formas de mirar hacia adelante. Daimler fue otra firma que recibió un gran espacio en esta edición del IAA en Hannover. Ellos, además de presentar algunas versiones 2019 de sus camiones ligeros mostraron al mundo un par de conceptos enfocados en su totalidad en "la conducción del futuro" que no es más que los vehículos sin conductor.

El primero fue una nueva versión de Actros, camión ligero lanzado en 1995, el cual estará llegando al mercado en 2019 y funciona a través de un sistema semiautónomo. El conductor tendrá acceso a dos pantallas para controlar el tráiler, además le servirán para revisar la información tanto del auto como de la carga que lleva.

En un proyecto más a largo plazo, la división de camiones de Mercedez-Benz, presentó el concepto autónomo "Vision Urbanetic". Esta idea resultó de las más interesantes en la exposición; pues sólo es una plataforma modular a la que se le pueden montar distintas carrocerías para propósitos varios.

La base sólo integra la batería y los sistemas de accionamiento para poner en movimiento el vehículo. Actualmente, cuenta con dos modalidades: una para pasajeros con capacidad de 12 personas y una caja de carga de 3.5 metros para llevar mercancía. También integrará la funcionalidad de administración de flotas a través de una aplicación.

Firmas menos conocidas de este lado del mundo dieron de qué hablar con sus proyectos autónomos diseñados para otros sectores, como el transporte público o el turismo. Es el caso de Hino, una filial de Toyota, que presentó un pequeño camión de pasajeros llamado Poncho EV. Este auto comercial al que le caben 36 pasajeros ya funciona en Japón y con su idea de cero emisiones y poco ruido circula en barrios cerrados sin molestar a sus habitantes.

MAN, IVECO, Scania y Volvo (que provee los camiones del Metrobús en la CDMX) son otros ejemplos de marcas que exhibieron con bombo y platillo sus camiones de pasajeros. Todos siempre con un concepto similar: eléctricos y autónomos. Cosas que parecían de un futuro lejano, hoy son más que una realidad. ¿Qué vendrá para la edición 2020, coches voladores?