Después se enteró que la menor estaba entre los heridos más graves del accidente, pues sufrió quemaduras de segundo grado en 25 % del cuerpo, principalmente en las piernas. (ARCHIVO)
Jacqueline Flores, de 47 años, aprovechó hasta los últimos segundos antes del despegue para mantener contacto telefónico con sus padres y hermanos, pero minutos después la comunicación fue para avisar que el avión en que viajaba sufrió un accidente.
Antes de iniciar el recorrido para despegar, el piloto Carlos Galván Mayrán alertó a los pasajeros del mal tiempo y aceleró los motores para emprender la carrera, cuenta la mujer.
Jacqueline era una de las pasajeras del Embraer 190 de Aeroméxico que el pasado martes 31 de julio sufrió un accidente, al parecer debido al mal tiempo que en el momento del despegue había en la ciudad de Durango, en el que sobrevivieron los 103 ocupantes de la aeronave.