Roger Federer tuvo algunos inconvenientes, pero logró derrotar 7-5, 6-4, 6-4 al complicado Benoit Paire.
El tenista suizo Roger Federer, segundo cabeza de serie, mantuvo su marcha triunfal en el Abierto de Estados Unidos al vencer por 7-5, 6-4 y 6-4 al francés Benoit Paire, número 56 del mundo.
Federer, de 37 años, que disputa por decimoctava vez el Abierto de Estados Unidos -torneo que ha ganado cinco veces consecutivas, del 2003 al 2008- tendrá como próximo rival al australiano Nick Kyrgios.
El duelo entre Federer y Kyrgios, de 23 años, será el cuarto, con ventaja para el tenista suizo por 2-1, incluida la victoria que logró este año en Stuttgart, y también se deberían haber enfrentado en los cuartos de final de Masters 1000 de Indians Wells, pero el jugador australiano se lesionó.
Las tres reuniones han resultado en desempates en el tercer set. De hecho, ocho de los nueve sets jugados se decidieron por desempates.
Ante Paire, el séptimo duelo que mantenían ambos jugadores, Federer mantuvo su marca perfecta de 7-0 después de una hora y 57 minutos de acción en la pista central Arthur Ashe Stadium.
No hubo drama pero el partido no fue rutinario para Federer como había sucedido en la primera ronda por lo que el exnúmero uno del mundo utilizó toda su experiencia y astucia para asegurar la victoria, que le facilitó su rival al cometer 47 errores no forzados, mientras que se encargaba de colocar 27 golpes ganadores y convertía cinco de las nueve oportunidades de quiebre que tuvo.
A una década de su último título en Nueva York, Federer consiguió su victoria número 35 en lo que va de competición en el 2018, toda una garantía que se encuentra en un gran momento de forma.
KYRGIOS, EN POLÉMICA POR 'AYUDA' DEL JUEZ DE SILLA
Nick Kyrgios encontró aliento de la fuente menos pensada: el juez de silla.
Tras una inusual visita del juez Mohamed Lahyani, el polémico tenista le dio un vuelco a su partido, cantó victoria y se instaló en la tercera ronda.
Kyrgios había cedido el primer set y perdía 3-0 en el segundo cuando Lahyani se bajó de su silla y se acercó para hablar al jugador, que en ese momento lucía desconsolado tras un cambio de lado.
En un momento se pudo escuchar que Lahyani le decía al 30mo preclasificado: "Déjame ayudarte. Yo sé que tú no eres así". Fue algo que rara vez ocurre en un partido.
Kyrgios no tardó en reaccionar, levantó su nivel y selló una victoria 4-6, 7-6 (6), 6-3, 6-0 sobre Pierre-Hugues Herbert.
Toda la atención estaba enfocada en Kyrgios y el inusitado episodio con el juez. ¿Acaso Lahyani se extralimitó en sus funciones de aplicar el reglamento? ¿Acaso hizo de entrenador?
Kyrgios, quien en una ocasión fue suspendido por el circuito de la ATP por jugar desganado, restó importancia a la intervención del juez.
"No estoy seguro que fue aliento. Me dijo que tenía simpatía. Solo dijo que no estaba dando una buena imagen", señaló Kyrgios.
"Él (Herbert) me dejó remontar en el segundo set", agregó.
Herbert opinó la contrario, al considerar que Kyrgios lució más concentrado tras charlar con Lahyani y que el juez de silla hizo algo incorrecto.
"No me parece que debe bajarse y asumir la tarea de un entrenador, como se ve en la WTA (el circuito femenino)", dijo el francés.
"No creo que sea apropiado que un juez se baje de la silla y le diga que quiere ayudarte", añadió.
El US Open y la junta del Grand Slam informaron que la intervención de Lahyani será investigada. El director del torneo Brian Earley explicó que Lahyani se bajó de la silla "para asegurar que podría comunicarse con claridad con Kyrgios" debido al ruido en la cancha.
Earley mencionó que Kyrgios fue informado por Lahyani de que "tomaría medidas" si el australiano proseguía con "el evidente desgano en el partido".
CRITICA FEDERER
Consultado sobre el incidente, Federer criticó a Lahyani.
"No es la tarea del juez bajarse de la silla", declaró el ganador de 20 títulos de Grand Slam.
"No sé lo que dijo. No me importa lo que dijo", añadió. "No se trata de solo preguntar cómo te siente. '¡Oh, es que no me siento tan bien!' y regresa a la silla. Estuvo ahí demasiado tiempo. Fue una charla. Las charlas pueden cambiar tu mentalidad. Puede hacerlo un fisioterapeuta, un doctor, un juez en este caso".