En el Día del Abuelo, los "huéspedes" de la Casa del Anciano del Padre Estala fueron festejados desde las primeras horas del día por grupos de voluntarios, quienes les llevaron desde música, pasteles, bocadillos hasta regalos para cada uno de ellos. Y es que pocos son los que cuentan con algún familiar que pueda pasar un momento con ellos.
Son alrededor de 38 los adultos mayores los que son atendidos en este lugar, ubicado en la colonia San Felipe de Torreón, en donde anteriormente se encontraba la Casa de la Misericordia, inmueble que les fuera entregado en el año 2016 para que contaran con un lugar más amplio y cómodo para los abuelitos.
De acuerdo con Alma Monroy, representante legal de la asociación, cerca de un 10 por ciento de los adultos que se atienden, cuenta con algún familiar que por diversas circunstancias no pueden ser atendidos por ellos, y el resto no cuentan con nadie y, además, son de bajos recursos.
Pero ayer fue "un día de alegría completamente", dijo. Y es que acudieron desde grupos de jóvenes que lanzaron una invitación a través de las redes sociales, hasta familias enteras para pasar un rato con estos abuelitos.
Y así ha sido durante todo el mes. Pero una vez que terminan los festejos, sólo una pequeña parte de los voluntarios mantiene sus visitas a lo largo del año.
Visita
Hoy a mediodía, el obispo de la Diócesis de Torreón, Luis Martín Barraza, estará de visita en la Casa del Anciano para ofrecer una misa y pasar un momento con ellos.
