Caso. La sentencia por abuso sexual contra cinco hombres que asaltaron en grupo a una joven sigue alimentando las protestas.
El gobierno español y el Poder Judicial expresaron hoy sus diferencias debido a la sentencia del caso de violación de una joven por parte de cinco hombres conocidos como "La Manada", a los que se condenó por abuso sexual pero se absolvió de agresión sexual.
La sentencia emitida el jueves generó indignación en los colectivos feministas, pero además la clase política cuestionó el trabajo de los tres jueces de la Audiencia Provincial de Navarra (norte de España) que instruyó el juicio a los acusados.
Los jueces Francisco Cobo y Raquel Fernandino rebajaron las peticiones de la Fiscalía de dictar 18 años de prisión a los procesados, y optaron por sentenciarlos a nueve años de prisión y descartan el ejercicio de la violencia.
El tercer juez Ricardo González emitió un voto particular en el que pedía la absolución de los cinco acusados, al considerar que no hubo violación y consideró que en los videos la víctima no siente dolor sino excitación, algo que indignó a las asociaciones feministas en este país.
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, declaró este lunes que ese juez "tiene un problema singular que todos saben", y se dijo sorprendido de que el Consejo General del Poder Judicial no hubiera actuado para impedir que eso ocurra.
El CGPJ respondió con una nota informativa en la que asegura que el juez no ha sido sometido a expedientes disciplinarios en los últimos cuatro años, y llama a la responsabilidad política para tratar de hacer un uso político de la justicia.