Fanáticos se besan antes del partido del grupo B entre Portugal y España durante la Copa Mundial de la FIFA 2018 en Rusia. Foto: EFE/Friedemann Vogel
No se puede suponer que ganar o perder dependa sólo de la actividad sexual que hubo o no antes del encuentro, si dicha conducta tuviera alguna influencia en el rendimiento físico, sería de tipo fisiológico o emocional.
En los días previos al inicio de la Copa Mundial de fútbol el medio italiano La Gazzetta dello Sport informó sobre las reglas impuestas por Joachím Low, director técnico de la selección alemana, para mantener a su equipo concentrado y fuerte durante todo el torneo. Una de ellas dio pie a los titulares de varias notas que retomaron el tema: nada de relaciones sexuales.
La actividad o la abstinencia sexual en los deportistas antes de una competencia importante, podría tener influencia en el rendimiento, pero sin ser determinante en el resultado, ya que para éste intervienen otros factores, afirmó el investigador Alonso Fernández Guasti.
No obstante, la ciencia no tiene una conclusión certera, hace falta mayor investigación de tipo científico para poder dilucidar el tema, señaló el especialista del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), ubicado en la Ciudad de México.
Fernández Guasti aseveró, en un mensaje difundido por la institución, que “hay quienes dicen que ejercer conducta sexual sí afecta a los atletas y otros que no".
"En los varones se ha sugerido que la actividad sexual antes de una competencia, no inmediata (una o dos noches previas), sí influye en su desempeño; se ha mencionado que es buena porque llegan a su competencia más relajados, contentos y con mayor ánimo, aspectos relacionados con su emocionalidad", señaló.
Las razones de esas señales de bienestar también están claras: cuando los seres humanos tienen relaciones sexuales, su motivación cambia y son más felices, eso les hace tener mejor rendimiento físico.
ENEMIGA
El especialista en conducta sexual considera que lo opuesto a la actividad íntima es más capaz de perjudicar a los atletas: la abstinencia sexual les podría generar un estado de estrés más fuerte a la hora de enfrentar la justa.
"Hay entrenadores que tienen estrictamente prohibido a sus jugadores tener relaciones sexuales y otros las promueven, evidentemente no antes de salir a la competencia, pero sí uno o dos días antes porque las creen benéficas para los deportistas”, comentó Fernández Guasti.
Atelier Biagetti, No Sex. Foto: Dezeen
Para profundizar en el tema, señaló, se requiere un estudio serio que permita comparar el desempeño en ambas situaciones.
En el caso de los futbolistas, advirtió, los resultados del estudio deberían tomarse con cuidado ya que el resultado de la competencia no depende de una sola persona, pues son 11 más los de la banca, además de que intervienen otros factores, como el rival o el clima.
Según el especialista no se puede suponer que ganar o perder dependa sólo de la actividad sexual que hubo o no antes del encuentro, si dicha conducta tuviera alguna influencia en el rendimiento físico, sería de tipo fisiológico o emocional.
En ese sentido, citó un estudio de Anthony Hackney, publicado en la revista Medicine and Science in Sports and Exercise, donde se concluye que los deportistas de alto rendimiento tienen problemas de fertilidad.
La investigación de Hackney refiere que los varones deportistas de muy alto rendimiento tienen menos interés sexual que los hombres con prácticas de ejercicio moderado o regular, pero no extremo.
Además, los ejemplares del sexo masculino con alto rendimiento físico presentan al menos dos factores que afectan el desempeño sexual: la fatiga y un cambio a nivel fisiológico, incluso, se sugiere una reducción de los niveles de testosterona.
En el aspecto emocional, añadió, la actividad sexual otorga tranquilidad y su relación con el desempeño físico resulta fundamental, “evidentemente el ejercicio de la sexualidad es benéfico para el individuo" por los aportes de felicidad y motivación”.
CUIDADO CON EL GOL
El ejercicio de la sexualidad antes de salir al campo pues, genera divisiones. Pero, ¿qué pasa fuera de la cancha, ya sea en el mismo estadio o en otros sitios, por ejemplo, en la comodidad del hogar.
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Coimbra, en Portugal, demostró que las sensaciones que experimentan los fanáticos del fútbol son similares a los sentimientos de una persona enamorada.
Foto: Archivo Siglo Nuevo
Ante las emociones positivas se libera más dopamina, un neurotransmisor causante de las sensaciones de placer o recompensa. Esto deriva en que, durante eventos como el Mundial, se incremente la proporción de embarazos entre la población.
En otro estudio, publicado en la British Medical Journal, se demostró que hay una relación directa entre los triunfos deportivos y el aumento de la tasa de natalidad. En Cataluña, España, los nacimientos aumentaron 16 por ciento tras la victoria del Barcelona en la Champions League del 2009.
Ante la euforia causada por la justa mundialista Rusia 2018, y en previsión al incremento poblacional que suele detonar, o las enfermedades de transmisión sexual que puedan surgir de la celebración, hay empresas que buscan hacer su agosto en junio.
Una de esas empresas es Playboy Condoms. Antes de que el balón se pusiera a rodar lanzó la campaña “Enciende tu pasión, pero sin autogol”.
Los de la marca del conejito difundieron en redes sociales un mensaje que de manera divertida busca fomentar una sexualidad responsable ante la evidencia de que la euforia futbolística aumenta el contacto sexual.
Se aborda la historia de un grupo de amigos reunidos en un bar para ver el partido. Al celebrar un gol uno de ellos entra en contacto con una desconocida porque “nada genera tanta euforia, todo es al doble, es el Mundial, eres otra persona, más cuando tu selección gana”.
Luego de ese encuentro, un golpe de suerte, el protagonista se encuentra en la cancha, en el área, tira, anota y después de nueve meses llega la bendición inesperada.
El humor del mensaje también recomienda al desprevenido progenitor “que la pasión no se desborde”, no vaya a ser que el niño acabe llamándose Neymar Gutiérrez o Cristiano López. Según Playboy Condoms, la misión mundialista, para los espectadores es festejar sin caer en fuera de lugar.
La concepción de un hijo no deseado es equiparada con meter un autogol, es decir, con lo peor que puede pasar en la historia del fútbol.

