EL SIGLO DE TORREÓN
Se espera que en septiembre, ahora sí, los integrantes de cinco ejidos cuyas tierras fueron expropiadas para la construcción de la supercarretera Durango-Mazatlán, reciban el pago por dicho procedimiento.
En algunos casos, pasaron ya 15 años desde que se ocuparon las tierras, lo que en diciembre pasado motivó a los ejidatarios a tomar la caseta Durango de dicha vía de comunicación, construida en terrenos del ejido "Garabitos", y donde hasta ayer se mantenían.
Galdino Torrecillas Herrera, consejero general de Asuntos Jurídicos del Gobierno del Estado, confirmó que los 60 millones de pesos acordados para este fin fueron ya liberados de forma conjunta por Banobras y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, por lo que es cuestión de trámite la entrega del recurso.
Dicho procedimiento fue informado el martes a los ejidatarios en un encuentro que sostuvieron con el área jurídica de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Estos recursos se repartirán entre los ejidos Otinapa, Máximo García (El Pino), 16 d Septiembre (Cieneguita), Lázaro Cárdenas (Garabitos) y Arroyo Seco, según se precisó.
El pasado 10 de diciembre, integrantes de los ejidos referidos tomaron la primera caseta de la supercarretera, exigiendo el pago que será entregado el mes entrante.
