Cosby parecía sobresaltado por la conmoción cuando media decena de manifestantes gritaban frente a él. (ARCHIVO)
Una mujer en topless, que llevaba escrito en su cuerpo el lema "los derechos de las mujeres importan", saltó ayer una valla y se colocó frente al cómico Bill Cosby mientras éste llegaba a una corte de Norristown (Pensilvania, EE.UU.) para ser juzgado por agresión sexual.
El incidente se produjo en el día en que está previsto el comienzo del nuevo juicio contra Cosby, que ya fue juzgado en junio de 2017, pero no hubo veredicto porque el jurado fue incapaz de ponerse de acuerdo y el proceso fue declarado nulo.
La mujer corrió hacia Cosby, pero fue apresada y esposada por los agentes de la oficina sheriff, que la apartaron del actor mientras gritaba: "¡Eh, eh, los derechos de las mujeres importan!", según mostraron las televisiones locales.
Las imágenes muestran que la mujer fue reducida y esposada en el suelo, entre unos arbustos.
La mujer comenzó su protesta quitándose una chaqueta negra para, a continuación, saltar una valla y plantarse ante Cosby con el puño en alto, mientras en su cuerpo aparecía pintado el lema "los derechos de las mujeres importan" y nombres de mujeres que hacían referencia a aquéllas que han acusado de abusos sexuales al actor.
Cosby parecía sobresaltado por la conmoción cuando media decena de manifestantes gritaban frente a él.
La manifestante, Nicolle Rochelle, de 39 años, originaria de Little Falls, Nueva Jersey, fue acusada de desorden público y liberada.

"La meta principal era hacer sentir incómodo a Cosby, porque es exactamente lo que ha estado haciendo por décadas con las mujeres, y mostrarle que el cuerpo puede ser agresivo y empoderado", dijo tras la protesta.
Rochelle, quien es actriz, señaló que ella nunca tuvo malas experiencias con Cosby cuando estaba en el programa y que no trató de lastimarlo físicamente. Es integrante del grupo feminista europeo Femen, famoso por organizar manifestaciones topless alrededor del mundo.
Cosby, icono de la cultura popular de EE.UU., ha sido acusado de abusos sexuales por más de 60 mujeres, aunque está siendo juzgado sólo por el caso de la canadiense Andrea Constand.
Constand asegura que una noche a principios de 2004 Cosby, que ahora tiene 80 años, la invitó a su mansión de Cheltenham (Pensilvania) y le dio unas pastillas que la marearon, la dejaron semiconsciente y sin posibilidad de luchar contra los abusos del actor.
Los dos se conocieron en 2001 mientras ella entrenaba el equipo de baloncesto de la Universidad de Temple (Pensilvania) y Cosby formaba parte del patronato del centro educativo.
Cosby sostiene que la relación con Constand fue consentida y que usaba drogas como señuelo para atraer a las mujeres, pero nunca como herramienta para incapacitarlas.
Está previsto que la defensa y la acusación presenten ante el juez Steven T. O'Neill sus argumentos sobre Cosby.
Sin embargo, la defensa presentó el viernes por la noche una moción para sustituir a uno de los 12 miembros del jurado que fueron seleccionados la semana pasada, una petición que podría retrasar el comienzo formal del juicio.
El actor se ganó el apodo de "papá de América" por su papel como doctor Cliff en la famosa serie La hora de Bill Cosby, un programa de la década de los 80 que mostraba la vida de una familia negra de clase media y que rompía con los estereotipos con los que los afroamericanos eran retratados hasta entonces en la televisión.
Ahora, sin embargo, Cosby se enfrenta a tres delitos de abuso sexual, que acarrean cada uno de ellos una pena máxima de 10 años de cárcel y una multa de 25.000 dólares.
Su nuevo juicio se produce en un ambiente radicalmente distinto y potencialmente más hostil. El movimiento #MeToo estalló cuatro meses después del primer juicio, concientizando sobre la violencia sexual y derribando a figuras como Harvey Weinstein, el senador Al Franken, Matt Lauer y otros hombres poderosos.