Tiene muchas propiedades. De tal manera que sus semillas son muy populares en los últimos años, pues los estudios han determinado que la linaza tiene importantes nutrientes que favorecen la salud y que actúan como un suplemento para bajar de peso.
Los expertos consideran que la linaza es un grano porque tiene un esquema de vitaminas y minerales similar a estos. Pero la mayoría coincide en que es una semilla, rica en fibra y antioxidantes, además de ser la mejor fuente vegetal de ácidos grasos omega 3.
Entre otras propiedades de la linaza, sobresale que es una fuente de fibra dietética, tanto soluble como insoluble. La fibra soluble es la que tiene la capacidad de ayudar a regular la presión arterial, los niveles de azúcar en la sangre e incluso se ha asociado con la prevención de diverticulitis y del cáncer de próstata.
Por lo que toca a la fibra insoluble, está relacionada como un mejor funcionamiento digestivo, pues es reguladora del movimiento intestinal, sirve de alimento a la flora bacteriana, lo que ayuda a digerir mejor los alimentos para una correcta absorción de nutrientes.
El ácido graso omega 3 de la linaza es considerado como uno de sus mayores beneficios, ya que no puede ser sintetizado desde otros alimentos por el cuerpo humano. Se sabe que el ácido graso omega 3 también está en alimentos como el pescado y los mariscos, pero a pesar de ser sintetizado por el cuerpo, no se absorbe en las cantidades requeridas.
El ácido linoleico (omega 3), es necesario para formar eicosanoides antiinflamatorios, los cuales juegan un papel muy importante en la prevención de artritis, eczema, asma y algunas condiciones de salud relacionadas con el aparato reproductor femenino.
Cabe mencionar que la linaza contiene unos fitoquímicos llamados lignanos que permiten combatir los radicales libres, al mismo tiempo que le aporta beneficios antioxidantes y anticancerígenos al organismo.
Por lo que se refiere al aspecto nutricional, entre otras propiedades de la linaza, se puede destacar que contiene vitaminas del complejo B, magnesio, manganeso, fósforo y tiamina. Con tan solo dos cucharadas de linaza le aporta al organismo el 8 por ciento de la fibra dietética recomendada y la misma cantidad solo cuenta con 74 calorías.
Por sus propiedades, la linaza tiene gran cantidad de usos medicinales que han sido aprovechados desde la antigüedad para tratar diferentes problemas de salud y prevenir enfermedades.
Perder peso: Por su riqueza en fibras vegetales, la linaza ha sido considerada como una de las buenas aliadas para las dietas con fines de perder peso. Sus propiedades ayudan a tener una mejor digestión, mejoran el metabolismo y además proporciona más sensación de saciedad.
Reducir el colesterol: Las fibras solubles de la linaza son ideales para reducir el colesterol en la sangre, pues favorece su eliminación por vías naturales. Además, puede contribuir a prevenir coágulos sanguíneos, derrames cerebrales y arritmia cardíaca.
Proporciona vitalidad y energía: El consumo de linaza hace que los músculos se recuperen rápidamente, debido a que estimula la utilización de las grasas para obtener energía, lo que a la vez beneficia para quemar grasas y perder peso.
Es anticancerígena: La linaza contiene 27 componentes anticancerígenos, entre los que se destacan la lignina. Además, los ecosanoides de la linaza la han relacionado en la prevención y tratamiento contra el cáncer de mama, endometriosis y quistes ováricos.
Aliviar los síntomas de la menopausia: Los flavonoides contenidos en la linaza pueden ayudar a tratar los molestos síntomas de la menopausia, como por ejemplo los cambios de humor, bochornos y pérdida de la libido.
Los fitoquímicos que contiene la linaza son ideales para balancear la carga hormonal, en especial en las mujeres. Por tal motivo no se recomienda consumir en estado de embarazo o lactancia, pero sí es recomendado para aumentar la fertilidad.
La linaza se puede conseguir en aceite, tabletas, molida y la semilla entera. Los expertos aseguran que la mejor manera de consumirla es molida, ya que el aceite se oxida con rapidez y la linaza entera es demasiado dura para el organismo.
Se recomienda comprar linaza entera y molerla preferiblemente en casa. La linaza se puede agregar fácilmente a ensaladas, comidas, jugos e incluso disuelta en agua.
También puede utilizarse como un sustituto del huevo, consumiendo una cucharada de linaza y tres de agua por cada huevo. También como un sustituto de grasas, consumiendo tres cucharadas de linaza y dos de agua por cada cucharada de mantequilla.