Nosotros Las palabras tienen la palabra VIBREMOS POSITIVO Eventos

PIÉNSALE, PIÉNSALE

PROGRESO O RETROCESO. TAMBIÉN LA REVERSA ES CAMBIOPROGRESO O RETROCESO. TAMBIÉN LA REVERSA ES CAMBIO

Se escucha frecuentemente por parte de autoridades del gobierno capitalino, de legisladores de izquierda que están por tomar sus curules, o de virtuales autoridades del nuevo gobierno, que la Ciudad de México está en la vanguardia del progreso por tener permitido el aborto y algunas otras leyes contra la familia y la vida, y que su intención es imponer el aborto en todo el país, legalizándolo incluso hasta antes del nacimiento y no sólo hasta las 12 semanas. Apoyados por medios de comunicación nacionales, caracterizados por ser pro-gobierno (cualquiera que éste sea), acríticos, o ignorantes, quieren hacer parecer como algo necesario y como parte del progreso que necesita México para ser un país "moderno".

Se hacen ciegos voluntarios ante la evidencia que proporcionan las ciencias biológicas, que demuestran que desde el momento de la concepción existe ya un ser vivo de la especie humana (persona); impulsados por una ideología irracional, se cierran también a argumentos contundentes de la sociología, que recalcan la importancia de la familia como base de la sociedad, primera formadora de ciudadanos integrados, productivos y armoniosos; obstinados en rechazar los datos que reportan los efectos devastadores que la sociedad tiene que enfrentar a consecuencia de problemáticas familiares como la desintegración, la pobreza, la inestabilidad y el divorcio (delincuencia, deserción escolar, maternidad de adolescentes, violencia familiar...), pretenden gastar los recursos del país en tratar de mitigar un poco los graves problemas sociales de familias dañadas (cárceles, hospitales abortistas, centros de recuperación de adicciones…), en lugar de proteger y promover a la institución familiar que, debilitada por tantos ataques, padece esas desgracias.

Pero las políticas públicas que deberían estar a favor de la familia, son sustituidas por otras que la atacan, leyes protectoras son derogadas e incluso se legisla en su contra en nombre de la modernidad y progreso, cuando en realidad son retrocesos del desarrollo humano. Además en nombre de quien no tienen el gusto de conocer: la libertad de expresión, el derecho de inclusión y el respeto a todas las opiniones, tachan de oscurantista y retrógrada a cualquiera que quiera proteger la institución familiar, convirtiéndose en lo que acusan.

La elección que ha hecho el pueblo de México el pasado primero de Julio, no fue por la muerte sino por la vida. La campaña de Morena tuvo mucho cuidado de no proponer el aborto como parte de su proyecto de gobierno; sabiendo el sentir de la sociedad, no quería arriesgar su triunfo electoral. La propuesta de luchar contra la corrupción, la impunidad, la pobreza y la violencia, es lo que impulsó a muchos ciudadanos a tomar la opción de un cambio en el gobierno, incluso prefiriéndolo a la opción que incluía al PRD, porque había dado en la capital de la república, muestras de su tendencia abortista.

Si en verdad se quiere un cambio verdadero (cuarta transformación), Será un grave error querer imponer leyes anti-vida y anti-familia, impulsadas por la ideología de género. En otros países eso ha dividido a la comunidad, pero en México la división sería entre el gobierno y la sociedad; entre legisladores y grupos dispuesto a ser el contrapeso que no tienen en las cámaras en donde es mayoría. El tan celebrado matrimonio entre pueblo y gobierno, terminará antes de consumarse; las esperanzas de renovación que el pueblo apenas había concebido, morirán abortadas por la desilusión.

La llamada 4ª. transformación requiere el apoyo de la comunidad para realizarla; Si los nuevos poderes nacionales en vez de llamar a la unidad y al apoyo con proyectos para los que todos queremos colaborar y para los que fueron elegidos, provocan esta división reduciendo la transformación a una deformación quimérica a base de leyes de moda, tendrán no solo la falta de apoyo de muchos grupos y organizaciones, sino tendrán como opositores a todo un pueblo que sabe ya de su poder y no está dispuesto a sufrir otra traición o infidelidad en la misma luna de miel.

La transformación no puede reducirse a leyes destructoras de la vida, de la familia y por tanto de México. aunque las llamen "modernas" o "progresistas". Ante las amenazas que han comenzado en este sentido, las marchas, protestas, manifestaciones, acciones de resistencia civil y de todo tipo, están ya cocinándose por parte de una sociedad organizada, poderosa y participativa.

Sin embargo hay otro camino que puede tomar el gobierno: declarase abiertamente en contra de estas tendencias anti-vida y pedir el apoyo de toda la población para rechazar la fuerte y poderosa presión internacional y los grupos internos, que empujan también en este sentido. Sería de gran impacto hacer desistir a Olga Sánchez Cordero de su intención de imponer en todo el país el aborto, o rechazar la propuesta del PRD del pasado 6 de septiembre que pretende modificar el artículo 4º. de la Constitución, buscando poner el aborto como un medio más para regular el número y espaciamiento de los hijos, y además establecerlo como obligación institucional, con el desmedido gasto que ello implicaría para el Estado y por tanto para la población, desviando recursos necesarios para otras prioridades que están causando más muertes que el aborto clandestino (aún con datos inflados).

Si toma el nuevo gobierno este camino, que por otro lado es el que le demanda la sociedad, entonces sí será una transformación creíble; renacerán las esperanzas populares y podrá ser apoyado en otro tipo de acciones transformadoras que el país tanto necesita para verdaderamente progresar.

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1499671

elsiglo.mx