Prometen bajarle al agua del canal

Ante el aumento de las filtraciones del canal del Sacramento hacia el fraccionamiento Santa Rosa, la Comisión Nacional del Agua se comprometió a corregir el problema mediante la reducción del gasto de agua y el sellado de la pared de dicho cauce a partir de este día, de ser posible con la ayuda de buzos.

El compromiso fue que en lo inmediato, se operaría la compuerta para bajar 20 metros cúbicos por segundo el gasto desde la presa Francisco Zarco, lo que hará menor el volumen de agua en el canal que en los últimos días ha estado "al tope".

A partir de hoy, iniciarán las labores de sellado para evitar que el agua siga trasminando hacia el sector habitacional y el problema quedará resuelto en un plazo máximo de 48 horas.

Fue necesario que los habitantes del fraccionamiento se agruparan e intentaran tomar la caseta de la Conagua que se ubica frente a dicho sector para obtener una reacción de los encargados de la dependencia.

Según señalaron, no estaban tranquilos con la respuesta que se les dio a inicios de semana por parte de la Dirección de Protección Civil, en el sentido de que no había riesgo de desbordamientos.

Mayela Soto dijo que la presencia de agua que sale de la pared empedrada del bordo aumentó y esto les generó mucha preocupación y hasta les quitó el sueño, por lo que algunos vecinos se quedaron toda la noche vigilando atemorizados de que el agua subiera e inundara sus casas, ubicadas en la parte baja a un costado del canal.

Otras personas manifestaron que en el interior de sus casas hay humedad y la atribuyen a esta filtración, al señalar que el agua se está extendiendo por el subsuelo.

Por la tarde, la alcaldesa Leticia Herrera Ale, acudió al lugar y se reunió con los vecinos, a quienes les dijo que no permitiría que ocurriese una desgracia, por lo que de ser necesario se tomarían las oficinas de Conagua para que atendieran el problema.

Esto luego de que desde el lunes los encargados de la dependencia se habían comprometido a reducir 20 centímetros el nivel de agua y no ocurrió, lo que generó inquietud y temor entre los vecinos ante la posibilidad de que éste se desbordara e inundara sus viviendas, que están ubicadas en la parte baja a un costado del canal.

Vía telefónica, la presidenta contactó al delegado de la Conagua, Óscar Gutiérrez Santana y le reclamó que no se haya bajado el volumen de agua como se había acordado, por lo que le pidió acudir y dar la cara a los afectados.

El funcionario acudió de inmediato y se comprometió a iniciar con los trabajos; se pedirá el apoyo de buzos para sellar cuanto antes mientras el agua sigue corriendo por el canal, aunque ya con menor volumen.

Manifestó que será necesario avisar a los agricultores de la medida, pues dejarán de regar los dos días que durarán los trabajos de sellado y tendrá que extenderse el ciclo agrícola.

Aseguró que las condiciones del canal "no son para que reviente", pero reconoció que es necesario corregir las filtraciones para que los vecinos estén tranquilos y con el fin de que el próximo ciclo se tenga un mejor aprovechamiento del agua.

La presidenta municipal pidió a los vecinos del fraccionamiento que mientras los trabajos se llevan a cabo no escarben ni "metan mano", luego de que algunos usaron palas para dejar al descubierto el área de la filtración, una labor que resultaría contraproducente al aumentar el hueco donde se está trasminando.

El regidor con licencia, Pedro Luna también acudió al lugar y recordó que hace tres años, se reventó el bordo e inundó el fraccionamiento Urbi, pero en este caso las consecuencias podrían ser mayores si no se actúa pronto, dado que el canal lleva más agua que entonces.