Mayores retos. Carlos Thome, presidente del IMEF laguna señaló que el nuevo acuerdo enfrenta grandes retos.
El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) de la Comarca Lagunera opina que con el nuevo acuerdo comercial pactado entre EU y Canadá es una noticia importante para todos, pero sobre todo para los mercados internacionales que han manifestado su agrado con los actuales resultados.
Sin embargo, Carlos Thome, presidente de este Instituto, dijo que dentro de los grandes retos y oportunidades que se tienen será el poder sustituir esos esos componentes asiáticos por regionales dentro del sector automotriz, ya sea en alianza o solos para su fabricación.
También, dijo, otro reto es el plazo dado en el tema de salario mínimo para las regiones productoras de automóviles en el país.
"La firma del acuerdo comercial es algo importante para todos, pero sobre todo para los mercados internacionales".
Opinó que, para México, en lo particular, es importante la continuidad que se tenía con el llamado TLCAN, aunque ahora se le cambien sus siglas.
Expresó el presidente del IMEF Laguna que esto garantiza una continuidad del intercambio comercial en condiciones favorables, en donde los industriales puedan seguir manteniendo un ritmo de crecimiento con EU.
Precisó que, si no se hubiera dado este acuerdo comercial, se hubiera que tenido que dar con las reglas de OMC, que da condiciones de flexibilidad, pero enfrentándose a una resistencia y hoy esto se acaba.
Retos y oportunidades
Citó Carlos Thome comentó que dentro las oportunidades dentro del ramo automotriz, particularmente en la composición de materiales de hasta 50 hasta 75 por ciento componentes americanos, en cierto plazo.
El reto planteado será sustituir a los asiáticos por productos americanos, en donde los mexicanos se organicen en forma conjunta o independiente, para fabricarlos.
Agregó que otro reto es el plazo de tiempo dado al salario mínimo para las regiones fabricantes de automóviles.
Reconoció que "nosotros éramos un paraíso industrial por el bajo nivel de salarios de armadoras".
Explicó que esto permitía sortear a las firmas los problemas de inseguridad y de un Estado de Derecho no confiable.
Apuntó que ahora el salario mínimo tendrá que ser competitivo en la parte mínima, por lo que dijo que la fortaleza que se tenía se estaría escapando, sino se suplen las condiciones de talento, de capacidad industrial y condiciones de manejo en el país.
