Ayuda. Cuerpos de rescate dieron una atención inmediata a la emergencia.
Las autoridades recuperaron las cajas negras del avión que se accidentó la tarde de antier martes en Durango.
Andrés Conesa Labastida, director general de Aeroméxico, enfatizó que el proceso de esclarecer las causas del accidente está en manos de la Dirección General de Aeronáutica Civil.
"Ya se recuperaron las dos cajas negras del avión, están en perfecto estado", complementó durante la conferencia de prensa ofrecida la tarde de ayer.
Además, se ha proporcionado alojamiento a los familiares que llegaron a Durango para acompañar a las personas lesionadas, incluyendo las facilidades de vuelo gratuito, y se ofrece apoyo psicológico junto con las disposiciones necesarias para realizar traslados en caso de ser necesaria otro tipo de intervención clínica.
Existe apoyo económico para cada uno de los pasajeros, a fin de que compren ropa y artículos personales, considerando la pérdida de todos los equipajes; dijo que Grupo Aeroméxico asumirá la totalidad del gasto generado por las afectaciones de los pasajeros, incluyendo los de tipo hospitalarios.
La tarde del martes se registró una intensa precipitación en forma de granizo, con una acumulación de 23 litros por metro cuadrado y una racha máxima de viento de 51 kilómetros por hora en el Observatorio Meteorológico; las condiciones climatológicas adversas se aluden extraoficialmente como las causas de que se desplomara el avión Embrair 190, cuando estaba en proceso de despegue del Aeropuerto Internacional Guadalupe Victoria.
Cuestionado sobre si no existía la previsión técnica para que el vuelo 2431 no despegara en dichas condiciones de clima, el director de Aeroméxico admitió que todos los aviones requieren autorización de las torres de control para despegar, pero dijo que no quería especular porque pudieron existir múltiples factores para causar el accidente.
Sobre el señalamiento del Colegio de Pilotos Aviadores de México, relativo al preocupante número de accidentes e incidentes aéreos en el país, Conesa Labastida enfatizó que la publicación del comunicado coincidió con el accidente de antier martes, pero que todos los involucrados en el sector nunca consideran suficientes los niveles de seguridad y a pesar de todo, la industria aérea es la más segura de transporte en el mundo.
En la misma conferencia de prensa, Ricardo de la Cruz Musalem, director general de Protección Civil del Gobierno federal, destacó que la tarde del martes se vivió un accidente sin precedentes en la condición de que no se registraron víctimas fatales.
"Hoy podemos hablar que los protocolos de emergencia funcionan, que dan resultado y por eso los debemos de seguir adoptando y practicando", expresó en su intervención.
Dijo que, hasta pasadas las 14:00 horas, permanecían hospitalizadas 22 personas, aunque la mayoría se estimaba su alta entre la tarde de ayer miércoles y el transcurso del jueves; otros permanecerán en observación. Caso particular es el de Carlos Galván Meyrán, piloto del avión siniestrado, con quien dijo que ya había sostenido conversación, que se encontraba consciente y con diagnóstico de salud favorable.
"Es importante mencionar que había una cantidad importante de extranjeros en el avión; algunos con doble nacionalidad y algunos solamente con la de sus países. Significativamente de Estados Unidos, también tenemos un ciudadano español y una colombiana que, en los tres casos, se está coordinando la Secretaría de Relaciones Exteriores con sus consulados o embajadas porque una de las preocupaciones de los pasajeros es reponer los documentos migratorios para regresar a sus países", declaró Ricardo de la Cruz.
Dijo además que en el vuelo AM 2431 había 99 pasajeros y cuatro personas de tripulación, quienes fueron atendidos inicialmente por los equipos de emergencia del Aeropuerto Guadalupe Victoria y posteriormente por los de Cruz Roja, Policía Federal y cuerpos de seguridad, reacción que evitó que hubiera decesos tras estrellarse a un costado de la pista.
ASEGURADORA
Salvador Pérez Álvarez, presidente de la Asociación de Seguros y Fianzas en Durango aseguró que varios pasajeros del vuelo AM 2431 usaron el seguro médico al cual tienen derecho.
Dijo que la aseguradora Mafre, contratada por Aeroméxico tiene registrados en Durango cuatro hospitales para asistencia médica de primer nivel y desde la tarde-noche del mismo martes se les empezó a avisar de ello a los pasajeros que resultaban con lesiones y que necesitaban algún tratamiento.
Ya se analiza extender la cobertura médica a otros hospitales.
Embraer envía técnicos
La empresa brasileña de aviación Embraer, fabricante del avión de Aeroméxico accidentado el martes en el estado mexicano de Durango, envió a un grupo de técnicos para investigar lo ocurrido, informó en un comunicado.
"La empresa está preparada para apoyar a las autoridades investigadoras. Para ese fin, un equipo de técnicos de Embraer fue desplegado a la escena del accidente", dijo la compañía en un breve comunicado.
La constructora brasileña, fundada en 1969 y actuante en los segmentos de la aviación comercial, ejecutiva y en la de defensa, señaló que el avión accidentado fue entregado en mayo de 2008, aunque según Aeroméxico fue incorporado a su flota hace apenas cuatro.
El martes, el director de Aeroméxico, Andrés Conesa, informó que la aeronave que cubría el vuelo 2431, de Durango hacia la Ciudad de México, con capacidad para un centenar de pasajeros, contaba con todos los estándares de seguridad, y puntualizó que había sido revisada por completo en febrero pasado.
Por otra parte, en marzo de 2016 fue el diputado federal, Jorge López Martín, quien presentó una iniciativa para que, en ningún caso, las aerolíneas operaran aviones con antigüedad mayor a 20 años en México, además de otorgarle a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) la atribución de contar con una estadística básica completa, pública y actualizada, sobre las características de la flota aérea mexicana.
Esto último porque la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) informó que hasta febrero de ese año, la flota aérea comercial de México estaba integrada por 318 aeronaves, pero únicamente 91 poseían registro de año de fabricación. El resto carecía de datos en la información.
Los 91 aviones registrados tenían en promedio 26 años de antigüedad y algunos otros databan de 1959.
El Colegio de Pilotos Aviadores de México planteó en su comunicado una insistencia en la necesidad de que exista una entidad investigadora de accidentes e incidentes de aviación, con capacidad jurídica propia, es decir, independiente de la autoridad aeronáutica.