Redes. De acuerdo a especialistas, una estrategia de ventas es estar presente en las redes sociales. (ARCHIVO)
Las redes sociales se han convertido en otro canal de mercadotecnia que incrementa las ventas y da a conocer una marca, aseveró el director de Marketingmundial.com, Jaime Bravo.
En un comunicado, el directivo señaló que además son una fuente de retroalimentación, porque permiten que los clientes se comuniquen con el empresario y comenten entre ellos, lo que se traduce en confianza de marca.
Dijo que el interactuar en las redes sociales se mejora la presencia en línea, debido a su acceso mundial, capacidad de compartir y una gran masa de usuarios conectados.
Del mismo modo, ayudan a mejorar el tráfico a los sitio web, escuchan a los clientes potenciales y responden a necesidades específicas, además lo traducen en un aumento de ventas.
Explicó que comparado con los medios tradicionales como radio, televisión y prensa escrita, el marketing de redes sociales está al alcance de cualquier empresa, a bajo costo y con excelentes resultados.
Una estrategia digital debe incluir todos los espacios de relevancia e interés para la audiencia, buscar influenciar opiniones, mejorar los resultados y analizar resultados para optimizar la estrategia, añadió el directivo.
Redes amenaza sociabilización
En la actualidad niños, jóvenes, adolescentes y adultos, dejan de tener vida social al crearse una “vida virtual”, advirtió el profesor de la Universidad del Valle de México (UVM), Érick de Jesús Olvera Monterrubio.El docente de la UVM, Campus Texcoco, afirmó que el impacto negativo de Facebook en jóvenes, por ejemplo, es que puede distorsionar el desarrollo de sus habilidades de socialización, al grado de tener más amigos virtuales que no se sabe si existen o si son como dicen ser. “Antes, cuando acudías a un restaurante, escuchabas voces, conversaciones, las personas platicaban, ahora sólo se escucha el tecleo de los teléfonos”, dijo el psicólogo a través de un comunicado de la UVM. Agregó que el uso de redes sociales hizo que se perdieran actividades sociales y familiares como el compartir la comida, lo que genera que no exista un proceso de socialización óptimo.
Olvera Monterrubio señaló que, en términos cognitivos de maduración y a nivel cerebral, el niño es quien sufre mayores efectos negativos.
