EL LÁPIZ DE LAS CEJAS, UN BUEN MARCADOREL LÁPIZ DE LAS CEJAS, UN BUEN MARCADOR
Para que no tenga que destapar los envases en que guarda diversos sobrantes y productos en el refrigerador, marque sus tapas. Mis recipientes son de plástico y es imposible marcarlos, quizá pensará que habría que pegarles etiquetas, pero hay otro medio. Destine uno de sus lápices de cejas únicamente para esto, la escritura prevalece aunque el envase esté mojado, sin embargo, usted la borra inmediatamente con agua jabonosa caliente.
LIGERAS TOSTADAS DE PLANCHA
Cuando vaya a planchar una prenda de lana, no se olvide nunca de colocar previamente sobre ella un trapo de plancha, no obstante, si desgraciadamente no lo hace alguna vez y se produce una ligera tostada en un sitio visible de la pieza, sature un pedazo de algodón con agua oxigenada y colóquelo sobre la parte afectada. Para cuando seque el algodón, la señal de la tostada habrá desaparecido, tome sus precauciones, sin embargo, para asegurarse de que el producto no decolorará la tela.
LAS CAMISAS VIEJAS DE SU ESPOSO
Aproveche esas camisas que su esposo o su hijo mayor ya no se ponen porque no les gustan, pero que todavía están en buen estado. Quíteles el cuello y las mangas y cubra las orillas con bies. Podrá usarlas en lugar de blusas para sus quehaceres domésticos en tiempo de calor. Si son blancas, las puede adornar con espiguilla. Le quedarán muy bien y estará bastante cómoda con ellas, además de que es una buena forma de aprovecharlas.
DELICIAS DEL PAN VIEJO
Si tiene pan blanco viejo, bollos o esos panecillos que usamos para hacer hot dogs y hamburguesas, en lugar de guardarlos para molerlos y usarlos para empanizar, ábralos por la mitad, úntelos de mantequilla y rocíelos con polvo o sal de ajo. Métalos al horno con calor mediano hasta que doren ligeramente. Deliciosos, si no los quiere dorados, envuélvalos en papel aluminio.