El gobernador de Coahuila Miguel Ángel Riquelme y el alcalde de Torreón Jorge Zermeño dialogaron ayer sobre la obra del Metrobús, motivo de constantes señalamientos por parte de las autoridades municipales las cuales consideran que hay lentitud y perjudica a varios sectores por donde atraviesa.
El acuerdo al que llegaron fue que la constructora trabajará también los fines de semana cuando se trate de introducciones de agua y drenaje, así como "sellamiento con el concreto" en cruceros congestionados.
La medida es para causar menos molestias, pero la obra sigue proyectada para finalizar en junio.
Respecto a estas actividades, la Secretaría de Infraestructura trabaja en coordinación con el Sistema Municipal de Aguas y Sabneamiento, Autotransporte y Vialidad.
