Hoy arranca un nuevo torneo en el futbol mexicano, cuando todavía no se completa el quinto día del año, ni siquiera el mes de que los Tigres levantaron el trofeo de campeón.
Hoy, es el propio monarca el que abre el Clausura 2018, en su visita a La Franja del Puebla, un equipo que lucha por no descender.
En los 8 torneos más recientes, Tigres sólo ha podido iniciar con una victoria en uno, precisamente ante Puebla, en el campeonato anterior. Por lo que probablemente hoy no gane, sobre todo si consideramos el poco tiempo que tuvieron de vacaciones después de la liguilla pasada; el argumento de siempre de los equipos que llegan a la final de diciembre.
Como sea, los Tigres tendrán 17 partidos y seis de liguilla para refrendar su título y seguir en esa infatigable y afanosa búsqueda de estar entre los "grandes" de México.
Lamentablemente, los torneos cortos dan para mucha polémica... y para que olvidemos pronto al campeón.
Desde que se instauró este formato, en 1996, equipos como Santos Laguna, Morelia o Monterrey han sido campeones; conjuntos que nunca lo lograron en el formato de "dos vueltas". *Monterrey fue campeón en 1986, pero en un torneo "corto" forzado por el inminente Mundial en el país.
Hasta los Gallos Blancos del Querétaro, equipo que parecía destinado a bajar de categoría siempre, ya sabe lo que es disputar una final de torneo corto.
El título para nada se demerita. Los 18 clubes de Primera División juegan bajo las mismas reglas; la competencia es igual para todos. Lo que es innegable, es que con dos campeones por año, se diversifica el festejo entre dos aficiones y a la vez, dura menos.
Para Santos Laguna, en el año del aniversario 35 de su fundación, la meta no debe ser otra sino sumar y sumar puntos para alejarse de la zona del descenso. Sumar como sea.
El año pasado fue lo suficientemente decepcionante para sus aficionados como para empezar este con discursos baratos. ¿Que la sexta estrella? Con calma, primero lo primero. Si el equipo se concentra y comienza a sumar desde el inicio, el resto llegará por consecuencia.
Robert Dante Siboldi encara su primer torneo como entrenador del máximo circuito desde el arranque; también él querrá demostrar de qué está hecho y para qué le alcanza.
En Tijuana, Diego Cocca viene por una revancha al futbol mexicano, luego de hacer nada por los Guerreros en años atrás.
Y en Cruz Azul, Caixinha se apunta como la posible solución a la sequía de campeonatos que sufre La Máquina, ¡20 años ya!
Monterrey va por su propia revancha y nada le será suficiente si no es el campeonato, de preferencia eliminando a Tigres en liguilla, que a su vez buscarán alargar la alegría que representa levantar el trofeo.
Pero es pronto para hablar. Apenas inicia una nueva aventura, con 18 contendientes y prioridades distintas. Los equipos del norte, de nuevo, a luchar contra la eterna "grandeza" de los cuatro "fantásticos", que si no me equivoco, son los que más títulos tienen en la actualidad. Tal vez por eso les digan "grandes".
Síganme los buenos, los malos y los feos, y que cada quien tenga lo que merezca.
Jsepulveda@el siglodetorreon.com.mx