El porcentaje de trabajadores en condiciones críticas de ocupación alcanzó 23.1 por ciento. (ARCHIVO)
Las condiciones laborales del país tienden a deteriorarse en medio del estancamiento económico y aun antes del impacto por el coronavirus. El porcentaje de trabajadores en condiciones críticas de ocupación alcanzó un máximo de 23.1% en febrero de 2020, la tasa más alta de la que se tenga registro, desde enero de 2005, cuando el Inegi comenzó a reportar esta serie. Éste es un indicador de condiciones inadecuadas de empleo desde el punto de vista del tiempo de trabajo, los ingresos o una combinación insatisfactoria de ambos. Incluye a las personas que se encuentran trabajando menos de 35 horas a la semana por razones ajenas a sus decisiones, más las que trabajan más de 35 horas semanales con ingresos mensuales inferiores al salario mínimo y las que laboran más de 48 horas semanales ganando hasta dos salarios mínimos.
Por su parte, la tasa de subocupación, referida al porcentaje de la población ocupada que tiene la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual le demanda, representó el 9.3% con base en cifras ajustadas por estacionalidad, la tasa más alta desde noviembre de 2015.