Tradición. Jesús Héctor Campos, de la librería El Principito, indicó que en diciembre puede llegar a triplicar sus ventas. (EL SIGLO DE TORREÓN/ SAÚL RODRÍGUEZ)
A pesar del avance de los libros digitales en el mercado, los lectores laguneros siguen prefiriendo visitar las librerías del centro de Torreón para hacerse de ejemplares físicos. La temporada decembrina es la época en que más ventas se generan en estos locales llenos de hojas y letras. Ya sea para conseguir un regalo en específico, por los intercambios en los trabajos o por el simple gusto de inducir a los más pequeños hacia el maravilloso mundo de la lectura, el flujo de clientes aumenta de manera considerable.
VENTAS
Fernando de la Vara, socio de la librería independiente El Astillero, indicó que de noviembre a febrero se presenta la temporada más fuerte. Tan sólo en diciembre, El Astillero registró un incremento del 150 por ciento en ventas con relación a otras épocas del año. De 500 libros que suelen venderse en un mes flojo, en diciembre la demanda puede aumentar hasta las dos mil unidades. Cabe señalar que existen ejemplares que parten desde los treinta pesos.
"En estas fechas la gente viene y se está más tiempo en la librería. Tengo clientes que han estado hasta tres o cuatro horas aquí".
De la Vara también comentó que para aprovechar el flujo implementan una tarjeta de regalo, debido a que suelen llegar clientes que buscan un obsequio para algún familiar y no saben qué ejemplar elegir. Además, resaltó los claroscuros del año debido a los recortes federales, a los cambios administrativos en la Dirección de Publicaciones y en el Fondo de Cultura Económica.
"Más bien creo que hay que generar espacios para el fomento a la lectura. Tratar de que haya un contacto más de las personas con el libro, pero de una manera de gozo, que busquen el placer en la lectura, tomando en cuenta de que el libro actualmente compite con un montón de cosas como series o películas".
Por su parte, Emilia Álvarez, encargada de sucursal en la Librería del Estudiante, también destacó un incremento en las ventas decembrinas, con un flujo de 50 clientes por día, en promedio. Compartió que en comparación al verano, las ventas en invierno incrementaron hasta en un setenta por ciento.
"Todavía hay gente que lee, pero también vamos muy abajo. Ahorita la tecnología nos está consumiendo en todos los aspectos porque ahora la gente prefiere bajar los libros digitales. Ya ahorita también nosotros estamos actualizándonos en vender los ebook para que el cliente ya no tenga el libro físico, sino en una plataforma".
Emilia Álvarez señalo que los libros más vendidos durante diciembre fueron aquellos cuyos autores son youtubers, la literatura para adolescentes y las sagas de terror.
PANORAMA EN LIBRO USADO
Los negocios de libros usados son otros de los lugares preferidos por los lectores laguneros. En estos rincones se respira la nostalgia en cada hojeada. Dora Alicia Romero, encargada de la librería Otelo (fundada por Jaime Martínez en 1990), observó que últimamente ha despertado el interés para que sus hijos pequeños se conviertan en lectores, "pues ya se están asustando de que no dejan el celular".
Mencionó que en diciembre recibió la visita de clientes provenientes de Nuevo Laredo, Ciudad Juárez y Chihuahua. Añadió que en su caso, las ventas son buenas durante todo el año, pues ya cuenta con una clientela fija que rara vez deja solo su local, con un promedio de 10 clientes por día.
En esta ocasión, recordó a una clienta que para el intercambio en su trabajo pidió libros de esotería y teología antigua. "Escogió y me dijo: 'Mira en el intercambio de mi trabajo quiero este regalo. Voy a mandar por ellos'. Y así como ella, varios querían tal libro en especial: 'Quiero el Márquez de Sade', por ejemplo. Y luego otros Los Tres Mosqueteros, y los querían para regalo. Pero sí fueron varios, unos 15 a lo mejor".
Finalmente, Jesús Héctor Campos, propietario de la librería El Principito, declaró que las ventas en su negocio aumentaron gracias a los clientes que no viven en Torreón y visitaron la región para pasar las fiestas de fin de año. Expresó que si normalmente vende de 10 a 15 libros diarios, en diciembre se dispara a lo doble o incluso lo triple de esa cifra.
Platicó sobre un cliente que se fue muy contento tras conseguir la enciclopedia México A Través de los Siglos. "Él me contó que tenía tiempo buscándola y felizmente la encontró aquí conmigo. Se fue muy contento".
Campos señaló que a pesar de que las enciclopedias son cada vez menos solicitadas, su cliente recurrió a ella por la nostalgia de que alguna vez estuvo en su familia y con el tiempo había desaparecido.
