El gobernador de Durango, José Rosas Aispuro Torres, anunció nuevas medidas para evitar contagios de COVID-19. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Tras asegurar que "los esfuerzos serán en vano si nos relajamos en el distanciamiento físico y salir a la calle", el gobernador de Durango, José Rosas Aispuro, dio a conocer ayer nuevas disposiciones para evitar la propagación del COVID-19 en el estado.
El mandatario estatal estuvo en una rueda de prensa acompañado por el alcalde de la ciudad de Durango,, Jorge Salum del Palacio y el secretario de Salud, Sergio González Romero, y dijo que las acciones serán más estrictas.
Entre otras medidas, destacó incrementar la presencia de elementos de seguridad en los filtros sanitarios, patrullajes en calles para conminar a los ciudadanos a quedarse en casa y el uso de cubrebocas obligatorio para todas las personas que estén fuera de sus hogares.
Por otra parte, mencionó que las plazas públicas han sido acordonadas, las cadenas de autoservicio tendrán que limitar el ingreso de clientes para evitar concentraciones dentro de sus establecimientos y mantener tareas de sanitización.
Los negocios no considerados como esenciales tendrán que cerrar, se continuará con las tareas de desinfección en el transporte público y se modificarán las rutas; en el caso de Durango, no entrarán al centro de la ciudad.
Las instituciones bancarias tendrán que replantear sus estrategias de servicio al cliente para propiciar el distanciamiento físico y se solicitará a los automovilistas que no viajen más de tres personas en un vehículo para mantener la sana distancia, detalló Aispuro Torres.
El jefe del Ejecutivo, manifestó que los infractores a estas normas serán sometidos a trabajo comunitario y exhortó a los duranguenses a quedarse en casa para poder detener la propagación del virus y actuar con un gran sentido de responsabilidad ante esta contingencia.