Familiares de Julio Alejandro interpusieron la denuncia por los delitos de homicidio calificado y lesiones, y exigen justicia.
Un fuerte hermetismo guardan las autoridades sobre las investigaciones del asesinato a balazos de un hombre a manos de elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), el pasado 18 de julio en la colonia Moderna de esta ciudad.
Como se informó en este medio, los hechos ocurrieron al filo de las 22:50 horas cuando Julio Alejandro, de 26 años de edad, de oficio albañil y con tres hijos de cuatro, tres y dos años de edad, con domicilio en la calle Cuauhtémoc de la colonia Moderna, salió de casa en su bicicleta para dirigirse a comprar leche para sus pequeños hijos.
Al regresar a casa fue interceptado por patrulleros de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), quienes lo cuestionaron sobre lo que andaba haciendo y le dijeron que le tenían que registrar sus pertenencias.
SE NEGÓ A REVISIÓN
Sin embargo, Julio Alejandro se negó, argumentando que no estaba haciendo nada malo y que tenía que llegar a casa.
Tras la negativa, los agentes comenzaron a forcejear con él y con Julio César, de 43 años, padre del muchacho, quien llegó hasta el lugar.
Padre e hijo intentaron retirarse a su domicilio mientras continuaban llegando patrullas al lugar, sin embargo, por motivos que se desconocen, los policías les dispararon en repetidas ocasiones.
Julio Alejandro murió en el mismo lugar de los hechos, en tanto que su padre fue trasladado e internado en el Hospital General, donde se restablece de las heridas recibidas.
Los familiares de Julio Alejandro acudieron el lunes a interponer la denuncia por los delitos de homicidio calificado y lesiones contra quien resulte responsable, en la delegación Laguna I de la Fiscalía General del Estado (FGE), pero se desconocen los avances del caso.
Han transcurrido ocho días del crimen y hasta el momento permanece impune, pues no se ha informado sobre la situación legal de los agentes que dispararon.
