La Diócesis informó que ya se trabaja en las nuevas medidas.
La Diócesis de Saltillo, a cargo del obispo Raúl Vera López, informó que ya trabajan para implementar las nuevas medidas sanitarias y así reabrir poder las iglesias. La diócesis proyecta reapertura para el mes de julio.
"Por la nueva normalidad en la que entramos debemos tener un regreso gradual, ordenado y cuidadoso a las actividades de la vida presencial de los fieles en los templos. Ello dependerá de la clasificación que la Secretaria de Salud ofrezca a cada estado de la República y de las decisiones que tomaremos sobre lo que observamos del acompañamiento a nuestras propias comunidades parroquiales".
En días pasados se implementó el semáforo epidemiológico en el país con el que se indica la intensidad y el grado de la infección del virus que se tienen en los estados. Coahuila está en color naranja con ascendencia a rojo. Es decir, está en riesgo alto.
La clasificación se da a conocer cada viernes, para modificar actividades el lunes siguiente, las cuales se mantienen esa semana.
Del 8 a 14 de junio, Coahuila estuvo en riesgo extremo al asignarle el color rojo, por ello las iglesias estuvieron cerradas.
El viernes 12 de junio se pasó al color naranja con ascendencia a rojo, pues los contagios tienden a subir.
El obispo explicó que en esta etapa se tiene permitido abrir las iglesias para celebraciones litúrgicas y se permite un aforo del 25 %; sin embargo, se decidió no abrir porque no se contaba, en la mayoría de los templos, con el equipo de seguridad que se encargará de la sanitizacion de los espacios.
Asimismo, Vera López explicó que los párrocos y rectores de cada templo tienen como plazo finales de junio para preparar los equipos de seguridad que controlarán el proceso sanitario y dependerán de las indicaciones de las autoridades para abrir las iglesias.
