Ciudadanos donan caretas de protección para el personal médico de la región Lagunera, mediante la impresión en tres dimensiones. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Frente a la pandemia por COVID-19 y el desabasto de equipo de protección en los hospitales, un grupo de laguneros trabaja de la mano para donar caretas al personal médico mediante la impresión en 3D en un plástico que, además, es biocompostable.
Luis Martín Rivera Zaragoza, director general de Laguna 3D, explicó que, siendo una empresa de impresiones en tres dimensiones, buscaron lo que se hacía en otros países y encontraron que una tendencia era recurrir a estos negocios para la elaboración de caretas debido a que las empresas de producción de plásticos y otros materiales habían cerrado, ante la crisis derivada de la pandemia.
"Nos interesó y empezamos a ver la idea de que pudiéramos hacer algo nosotros, el tema no estaba tan fuerte en México, se estaban cancelando las clases, así quedó hasta que platicamos con Max Cuevas, director de los equipos de Robótica del Colegio Cervantes, ellos también habían visto esta idea y se habían propuesto iniciar el proyecto, entonces nos unimos", comentó.
El proyecto inició con pocas impresoras y poco a poco se fueron sumando más, mientras que el problema del COVID-19 también iba en aumento en el país, por lo que la apuesta por proteger al personal del sector Salud, principalmente, cada vez era más necesaria.
"Es un proyecto que nos llena de mucho orgullo, poder colaborar, que se entregue algo que ayude, la idea de poder contribuir con un utensilio de vital uso para los médicos es muy satisfactoria. Somos muchas personas las que estamos apoyando el proyecto, se sumaron más empresas con impresoras 3D e incluso cortadores, ya metimos nuevas tecnologías, arquitectos, doctores, que también están buscando más opciones", explicó.
LAMENTA DISCRIMINACIÓN
Rivera Zaragoza lamentó las agresiones que han sufrido enfermeras y personal médico de algunas instituciones de salud por el pánico de algunos frente a la pandemia, pues indicó que se trata de gente con un gran valor humano que se arriesga día a día por los demás, pero que también tienen familia.
"Ellos también tienen preocupaciones de cuidar a su familia, de cuidarse ellos mismos, necesitamos tomar conciencia y apoyarles, porque a final de cuenta, son los que nos van a estar cuidando en el hospital, necesitamos agradecerles a estos desconocidos que están ahí para nosotros", expresó.
COMPOSTABLE
Las caretas se elaboran con distintos materiales, pues la impresión 3D brinda la oportunidad de trabajar distintos plásticos. La diadema es biocompostable, de modo que al final de su uso, cuando ya cumplió su periodo de vida y se va a desechar, se puede meter a un proceso de compostación para que no se tire y contamine el ambiente.
"El plástico más común es el PET, como el de los refrescos, que se puede reciclar, el otro es el PLA, que se puede compostar y es a base de almidón de maíz con una mezcla de plástico", expuso.
A raíz de las recomendaciones sanitarias de permanecer en resguardo en casa, la empresa Laguna 3D opera solamente algunos días de la semana con el mínimo de personal y con acceso limitado en el taller, además de que han extremado las precauciones en el exterior para evitar el contagio de COVID-19.
Rivera Zaragoza lamentó que aún hay mucha gente que no cree que existe esta enfermedad y no han acatado las medidas sanitarias que demanda la emergencia, pues ello pone en riesgo al resto de la población, que esté en contacto con ellos, y alarga el periodo de cuarentena.
"Hay mucha gente que se aplicó la cuarentena, ellos mismos buscaron quedarse en casa y son muy disciplinados, pero cuando hemos salido vemos que hay gente que pareciera que sigue su vida normal, sin ninguna protección. No podemos juzgar por qué salen a la calle pero yo siento que nos falta mucho como sociedad, todavía no nos la creemos, falta que nos caiga el veinte para que se tomen ya las precauciones máximas", explicó.
El director de Laguna 3D llamó a la ciudadanía a sumarse a la campaña que inició con dos equipos y poco a poco ha añadido a más gente, por lo que se mantiene abierta la convocatoria en el Colegio Cervantes para que más empresas puedan aportar ideas y tecnología que puedan beneficiar al personal de la salud.
