ILUSTRACIÓN: HESSIE ORTEGA
Personajes del mundo deportivo no se salvaron de la huesuda, pues lectores de El Siglo les dedicaron calaveritas con motivo del Día de Muertos.
MATHEUS DÓRIA
Lo llevaron al panteón, pero en una carretilla,
le rezó a la Santa Muerte para entrar a la liguilla.
Su cuerpo lo están velando en la colonia La Dalia;
quería jugar con el “Chucky” en el Napoli de Italia.
Era muy buen jugador, lo querían el “Piojo” y el “Tuca”.
Dicen que allá en el infierno juega con una peluca.
No saben de qué murió, salió mal en un estudio;
ahí estuvieron en su velorio el “Mudo”, el “Charal” y Julio.
Dio la noticia el doctor de que Matheus tenía leucemia;
me lo dijo el profe Almada, que murió por la pandemia.
En su caja le pusieron su camisa y una lona,
pidió que lo sepultaran en el estadio Corona.
Su funeral fue sencillo, dieron café con galletas;
su familia está muy triste porque tenía muchas metas.
Siempre se esforzaba al cien con el equipo que fuera;
en la entrada del estadio se encuentra su calavera.
J. Ochoa
EQUIPOS REGIOS
Llegó la huesuda a Monterrey,
pues andaba muy perdida,
para buscar al equipo más wey;
había dos y no elegía.
Unos eran los rayados,
otros eran los felinos;
unos, con estadio salado,
y otros, con estadio cochino.
Mejor me voy a Torreón,
donde el verdiblanco predomina,
pues ahí juega el equipo más chin...
el Santos Laguna, que a los
regios domina.
Héctor Eduardo Tovar Pereyra
COMARCA LAGUNERA
Con uniforme del Santos
llega muy tempranera,
empujando el Metrobús,
la calaca lagunera.
Los primeros en marchar
son de El Siglo de Torreón,
luego los de la Alianza
y los del ejido La Unión.
Colgaré sus esqueletos
en vista de que no hay panteones,
y la gente los verá
en el puente rumbo a Gómez.
J. Bertin Castro Carreón