El cuerpo fue encontrado entre la basura, en un pequeño terreno que está atrás de una fábrica. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Envuelto en una cobija y con huellas de violencia, fue localizado el cuerpo sin vida de un hombre la tarde del pasado sábado en la colonia Eduardo Guerra de Torreón.
El hallazgo del cadáver se reportó alrededor de las 16:00 horas a través del sistema estatal de emergencias 911, y se indicó que en la avenida Tercera, entre las calles P y Q de la colonia Eduardo Guerra de Torreón, había una persona sin vida.
De inmediato, varias unidades de la Policía Municipal, de la Policía de Acción y Reacción (PAR) y de la Policía Civil Coahuila se movilizaron hasta el lugar, donde confirmaron el hallazgo y procedieron a acordonar el área con cinta amarilla, en espera del arribo del personal de la Fiscalía del General del Estado (FGE).
El cuerpo se encontraba en un pequeño terreno ubicado atrás de un fábrica, el cual es utilizado como tiradero de basura, incluso, frente al lugar hay unas bodegas que hace algunos años eran ocupadas por la Dirección de Servicios Públicos y Parques y Jardines del municipio.
De acuerdo con algunos vecinos, fue una joven quien pasó al lado de basurero y observó un "bulto" que le pareció extraño y al acercarse, se percató de que se trataba de un cuerpo pues que encima de las cobijas estaba amarrado con un mecate.
De inmediato acudió a contarle a su padre, quien a su vez pidió a un vecino que marcara al 911 para pedir la presencia de las corporaciones policiales.
Según el reporte de las autoridades, el hombre se encontraba envuelto en una sábana, así como en una cobija; estaba boca abajo y simple vista se apreciaba que tenía las manos amarradas hacía atrás, además de un cable en el cuello; por encima fue amarrado con mecates.
Se trataba de un hombre joven, que vestía una playera en color rojo y un short del mismo, color con rayas azul marino en los costados, y tenía tatuajes en el antebrazo y muñeca del lado derecho.
En el lugar no se encontró alguna credencial que ayudar a su identificación.
Personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y de los Servicios Periciales se encargó de tomar algunas evidencias para iniciar las investigaciones correspondientes.
Más tarde, el cuerpo fue llevado por una empresa funeraria a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), para la práctica de la necropsia de ley y en espera de su identificación oficial.