El ciclista británico antepuso la salud al deporte, pues los aficionados son importantes en el apoyo dentro del Tour de Francia. (ARCHIVO)
El corredor del Team Ineos, Geraint Thomas, aseguró que un Tour de Francia sin aficionados "no sería lo mismo".
"No sería el Tour sin aficionados", dijo el ciclista en una entrevista con el diario británico The Telegraph. "Sería mucho más difícil dejar sin público al Tour que a la París-Niza, pero creo que todo está cambiando muy rápido, así que es complicado especular. Solo espero que se acabe muy rápido", añadió.
Thomas, ganador del Tour en 2018, solo quiere volver a montar en su bicicleta de nuevo, pero apuntó que solo si es seguro hacerlo. "Al final, lo importante es la salud y la seguridad de la gente".
El británico entiende que haya gente que diga que esto solo es deporte y añadió que probablemente dentro de veinte años no importe mucho si en 2020 no hubo Tour.
"Pero por otra parte, hay veinte equipos y empresas que han invertido en esos equipos, gente que se puede quedar sin trabajo. Aunque el resultado en sí no importe, el evento sí importa, porque hay muchas vidas involucradas en ello".
NO QUIERE NI PENSARLO
El ciclista francés Julian Alaphilippe, gran animador del Tour 2019, no concibe que la ronda francesa pueda disputarse este año "a puerta cerrada", sin público, por culpa de la pandemia de COVID-19, una hipótesis que los organizadores manejan como alternativa a la suspensión.
El líder del equipo Deceuninck-Quick Step, que este año vistió el jersey amarillo de líder durante dos semanas en el Tour, no quiere ni pensar en que eso pueda ocurrir, aunque la ministra francesa de Juvenud y Deporte, Roxana Maracineanu, comentó el pasado miércoles que un Tour "a puerta cerrada" entraba dentro de lo posible.
"Sería insólito", apuntó Alaphilippe en declaraciones a RMC Sport. "No me lo imagino. El público es parte del Tour de Francia. Imagina el Mundial de fútbol en un estadio vacío", apuntó el ciclista francés, quinto este año en la ronda francesa.
El Tour de Francia, cuyo comienzo está previsto para el 27 de junio, se ha venido disputando ininterrumpidamente todos los años desde la Segunda Guerra Mundial y es, por el momento, el siguiente "gran monumento" del deporte universal amenazado de suspensión por el coronavirus, como ha sucedido ya con el Giro de Italia y las clásicas de primavera.
Según diversos medios franceses, la empresa ASO, organizadora del Tour, se ha dado un plazo hasta el 15 de mayo próximo para tomar una decisión definitiva.