El año pasado se registraron 91 vehículos y la derrama económica alcanzó los 30 millones de pesos. (ARCHIVO)
Pese a las restricciones por la pandemia por COVID-19, superan la derrama económica alcanzada por el Coahuila 1000 Desert Rally, pues se estiman más de 35 millones de pesos en hospedaje, alimentos y servicios, con una participación de 100 vehículos y más de 400 personas tanto en la carrera como en el paseo turístico.
El año pasado se registraron 91 vehículos y la derrama económica alcanzó los 30 millones de pesos. El evento se llevará a cabo del 26 al 29 de agosto y abarcará a los municipios de Saltillo, Parras y Torreón.
Luis Cuerda Serna, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), explicó que la dinámica cambiará mucho en términos de la convivencia que se tenía anteriormente, pues las cenas se servirán directamente en las habitaciones y no habrá junta presencial de pilotos.
"Ese tipo de contacto se tiene que posponer, usaremos la tecnología que hoy está a la mano para reunirnos, hacer los informes, las rifas, las premiaciones, que tendrán que ser con todos los protocolos que marca la Secretaría de Salud del estado", expuso, "la derrama económica va a sufrir un incremento importante debido a que mucha gente está haciendo la preruta, lo que está dejando mucha derrama al estado de Coahuila, hablamos de un crecimiento importante del evento".
Cuerda Serna consideró que la reactivación de la carrera es un acierto por parte del gobierno del estado, pues posicionará a Coahuila a nivel nacional como punta de lanza en cuanto a su apertura al turismo, el seguimiento de los protocolos y las recomendaciones de la Secretaría de Salud.