Hasta ayer 29 de diciembre había 124 ventiladores disponibles para enfermos graves de COVID.
La ciudad de Torreón reportó una ocupación de 41 ventiladores (33.06%) para enfermos graves de SARS-CoV-2 que se encuentran hospitalizados. La capacidad total en las unidades de salud de este municipio es de 124 ventiladores por lo que hasta ayer 29 de diciembre había 83 equipos disponibles para tratar a pacientes críticos de coronavirus.
En el reporte estatal, la Secretaría de Salud de Coahuila indicó que hay 197 pacientes positivos a COVID-19 y con sospecha de esta enfermedad que se encuentran internados, esto se traduce en una ocupación de camas del 37.38 por ciento. La capacidad total es de 527 camas COVID y la disponibilidad de 330, esta cifra se mantuvo del 28 al 29 de diciembre. Ayer, Torreón llegó a las 258 muertes por COVID-19 en lo que va del presente mes y a los 267 casos activos de esta enfermedad.
A un día de que concluya este año 2020, la Región Lagunera de Coahuila tiene solo un indicador para la estimación del riesgo epidemiológico en color rojo y se trata del Porcentaje semanal de positividad al virus SARS-CoV-2, que tiene una métrica de riesgo máxima de 4 puntos.
La Secretaría de Salud del estado indica que hay dos indicadores en color naranja que son la Tasa de incidencia de casos estimados activos por 100 mil habitantes y la Tasa de casos hospitalizado por 100 mil habitantes. Mientras que en color amarillo se posiciona la Tasa de mortalidad por 100 mil habitantes.
En verde está la Tasa de reproducción efectiva (Rt) de COVID-19; el porcentaje de camas generales IRAG; el Porcentaje de camas con ventilador; la Tendencia de casos hospitalizados por 100 mil habitantes; la Tendencia de casos de síndrome de COVID-19 por 100 mil habitantes y la Tendencia de la tasa de mortalidad por 100 mil habitantes.
El jefe de la Jurisdicción Sanitaria VI en La Laguna, Juan Pérez Ortega, hizo un llamado a la ciudadanía para atender las medidas sanitarias con el fin de evitar los contagios y la propagación del virus. Indicó que si bien, la aplicación de la vacuna contra el COVID-19 al personal de salud ayudará disminuir la incidencia en esta región, la ciudadanía no puede relajar las disposiciones de salud pues la movilidad social es un alto riesgo de transmisión del SARS-CoV-2. Por ello, se recomienda continuar con el uso del cubrebocas, la aplicación del gel antibacterial y el respeto por la sana distancia.