Los gobernadores Francisco Javier García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas, y Jaime Rodríguez Calderón, de Nuevo León, coincidieron con Riquelme Solís y reiteraron su agradecimiento.
En Reunión de Coordinación Regional de Seguridad, el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, dijo ante sus homólogos de Nuevo León y Tamaulipas que la coordinación lograda entre las tres entidades ha permitido localizar y capturar delincuente, recuperar la confianza de la sociedad para los tres estados.
Los gobernadores Francisco Javier García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas, y Jaime Rodríguez Calderón, de Nuevo León, coincidieron con Riquelme Solís y reiteraron su agradecimiento al Ejército Mexicano y la Guardia Nacional por acompañarlos en esta tarea de mantener el orden en los tres estados del noreste.
Riquelme enfatizó que ante la contingencia sanitaria del COVID-19 se le dio prioridad a las reuniones de salud para enfrentar juntos la pandemia, pero se da seguimiento a la seguridad.
Cabeza de Vaca, dijo sobre los acuerdos de seguridad que se decidió incrementar la comunicación interinstitucional. Localización de objetivos prioritarios, acciones de alerta temprana y despliegue coordinado, mejorar vínculos de C4 y C5 instalados en los tres Estados.
El gobernador de Coahuila, planteó a sus pares de Nuevo León y Tamaulipas la necesidad de homologar criterios en las nuevas modalidades de la Fiscalía, centros de justicia y cómo poder atender al ciudadano que presenta una denuncia.
"Buscamos retomar nuevas estrategias de acuerdo a la situación actual. Hemos revisado y evaluado, las tres entidades federativas, los distintos delitos que nos ocupan en esta región, y con base en ello hemos dictado algunas estrategias que nos permitirán combatir al crimen dentro de las nuevas modalidades que a efecto de la contingencia han adoptado los grupos criminales", abundó Riquelme.
En su intervención, Rodríguez Calderón, de Nuevo León, señaló que se necesita mantener el no contagio en los penales, centros de reclusión en los que existen un número importante de personas, por lo que se normarán criterios en los tres Estados para establecer protocolos de comunicación entre las personas privadas de su libertad y sus familiares, y que puedan estar tranquilos.