Tras hacerse viral, la joven colocó en modo privado su Twitter. (CAPTURA)
Megan Rixon, una joven británica compartió en redes sociales el atros trabajo que le realizaron en un salón de belleza tras acudir a retocar sus pestañas.
La joven expuso en Twitter que mientras se las aplicaban, comenzó a sentir un fuerte dolor en los párpados, pero la trabajadora que se las aplicaba aseguró que era normal.
Tras finalizar el trabajo, Megan se recostó unos minutos para dejar que el pegamento secara pero al intentar abrir los ojos, descubrió que sus ojos estaban completamente pegados.
Al reclamar a la mujer responsable, ésta confesó que había utilizado pegamento de uñas porque el de pestañas se había terminado en el salón.
Por medio de las mismas redes sociales, cientos de usuarios han compartido el caso para advertir sobre la irresponsabilidad de algunas trabajadoras.
