El gobernador declaró que la muerte del agente Carlos Enrique Solís no será en vano.
El gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís encabezó el homenaje póstumo que el pueblo y el Gobierno de Coahuila rindió al oficial de la Policía Estatal, Carlos Enrique Solís Peña, quien el pasado martes perdió la vida en el cumplimiento del deber en enfrentamiento contra delincuentes, ocurrido al norte de la entidad.
En su mensaje, el mandatario expresó: "su sacrificio no será en vano, hoy nos motiva y reafirma nuestra determinación por blindar Coahuila en contra de todo interés ajeno al bienestar colectivo, y de afrontar cualquier amenaza que intente vulnerar la tranquilidad y el orden público.
Ante la hoy viuda del valeroso elemento, Sofía Guadalupe Peña Arriaga; de sus padres, Alejandrina Peña Álvarez y Miguel Ángel Solís Badillo; autoridades civiles y militares, así como de compañeros del infortunado servidor público, Riquelme Solís, enfatizó que la máxima prioridad del Estado es la paz de todos sus habitantes.
Transmitió sus sinceras condolencias a todos los seres queridos del cumplido elemento de la Policía Estatal, y les reiteró el permanente apoyo, solidaridad y acompañamiento del Gobierno del Estado.
"Despedimos hoy a un policía ejemplar que desde enero de 2019 que se incorporó a la corporación estatal se distinguió como un oficial con el más alto sentido del deber, entregado por entero a la misión salvaguardar la vida de las y los coahuilenses", expresó el Mandatario estatal.
En las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública, en cuyo Muro de Honor quedó inscrito para la posterioridad el nombre del valiente, leal y entregado policía estatal, el gobernador Miguel Riquelme reiteró que en la búsqueda de la paz de toda la población no descansamos ni un sólo día en esta misión.
En el Homenaje Póstumo, el Mandatario estatal encabezó la primera Guardia de Honor ante su féretro, junto al Alcalde de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas; la titular de la SSP, Sonia Villarreal Pérez; el Fiscal General del Estado, Gerardo Márquez Guevara, y el Comandante de la VI Zona Militar, General Guillermo Nava Sánchez.
Luego, los elementos que integraron la Guardia Permanente que custodió el féretro del acaecido elemento, recogieron el Estandarte del Estado de Coahuila que cubrió el ataúd, para entregarlo al gobernador Miguel Riquelme, quien a su vez lo depositó en las manos de su viuda Sofía y sus padres, Alejandrina y Miguel Ángel.En tanto, elementos de la Policía Estatal tuvieron a su cargo un disparo de salva en honor del valiente oficial.
Por su parte, la Secretaria de Seguridad Pública en Coahuila, Sonia Villarreal Pérez, transmitió sus condolencias a la hoy viuda Sofía Guadalupe y al pequeño Carlos Nicolás, hijo del oficial Carlos Enrique, y dijo: "Desde el Gobierno del Estado compartimos su dolor, la angustia y el coraje al ver cegada su vida.
"Estamos aquí para rendir honor a Carlos y a quienes se enfrentaron, junto con él, a repeler este ataque cobarde, y que hoy se debaten entre la vida y muerte.