(JOSÉ A. RODRÍGUEZ)
El Frente Nacional contra la Violencia Vicaria realizó una marcha para protestar por los casos de violencia, que la autoridad no ha atendido y que guarda silencio, entre ellos el de “Lupita” Vázquez.
La violencia vicaria es aquella que tiene como objetivo dañar a la mujer a través de sus seres queridos y especialmente de sus hijas e hijos.
El último caso que se ha conocido de violencia vicaria en Durango, y que concluyó en feminicidio, fue el de “Lupita” Vázquez, quien fue desaparecida el 24 de octubre y su cuerpo fue encontrado en la cajuela de su auto el 30 de octubre, donde el principal sospechoso es el esposo que huyó y está desaparecido.
Lilia Campos, prima de “Lupita”, señaló que desde ese día, el 30 de octubre, la Fiscalía del Estado ha guardado silencio sobre el caso, a casi un mes no ha hecho nada, ni les ha informado sobre una investigación a los familiares.
Aunque los hijos de “Lupita” están con sus abuelitos maternos, el DIF no ha procedido para darle la custodia legal de los niños a la abuela materna.
Pero, así como el caso de “Lupita” donde las autoridades guardan silencio, existen otros 20 casos que a decir de Abilé Ortiz, integrante de este frente nacional, las autoridades prefieren guardar silencio, incluso durante cinco años.
La macha realizada en Durango este 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, busca que el Congreso local apruebe la Ley Vicaria que, aseguran, es la antesala del feminicidio.
