A casi un mes de haber iniciado las campañas electorales para la renovación de la gubernatura de Durango, y apenas 16 días después de que arrancara las campañas para las presidencias municipales con mayor población, como es el caso de la capital del Estado, Gómez Palacio y Lerdo, los ánimos están más que caldeados.
El día de ayer estuvo por La Laguna duranguense Otniel García Navarro, presidente estatal de Morena, para brindarles apoyo a sus compañeras Marina Vitela y Betzabé Martínez Arango, candidatas a la gubernatura y la alcaldía gomezpalatina respectivamente.
García Navarro, hoy dirigente morenista y ayer rancio priista, en rueda de prensa declaró que el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís está metido "hasta las trancas" en el proceso electoral duranguense, particularmente en la región lagunera.
Sin presentar pruebas, Otniel acusa al gobernador Riquelme de que operadores electorales están trabajando en las campañas de Esteban Villegas y de Leticia Herrera, acusándolo de que destina recursos del erario coahuilense para este objetivo.
Aunado a lo anterior, Morena denunció que se les quemaron par de lonas colocados en sendos anuncios panorámicos ( espectaculares) uno de ellos se encuentra ubicado en zona del bulevar Carlos Herrera y el otro en CBTIS 147. Uno contaba con una ilustración de Marina y la otra de Betzabé.
En la propia declaración de queja sobre la quema de lonas para espectaculares, la dirigencia morenista acusó directamente a los equipos de campaña de Villegas y de Herrera de ser los artífices de los incendios, aduciendo que es la desesperación de los aliancistas (tanto Esteban Villegas como Leticia compiten bajo las siglas de una coalición conformada por PAN-PRI-PRD, al igual que la exalcaldesa Leticia)
A las anteriores acusaciones, se agregaron otras más, una hecha por la candidata Martínez que asegura que un compañero suyo de campaña fue golpeado por los rivales, además de señalar que en Mapimí sus adversarios se comportan con actitud agresiva.
Otniel dijo también que su partido analizará la posible expulsión del diputado federal con licencia y actual síndico de la Gómez Palacio, Omar Castañeda, ya que como es del conocimiento social, Castañeda buscó la candidatura a la alcaldía de Gómez Palacio, pero le fue negada, pese haber obtenido apenas el año pasado una contundente victoria como candidato al II distrito federal (Durango tiene 4 distritos) con cabecera en el propio Gómez Palacio. El síndico Castañeda llegó dentro de la planilla que encabezó la hoy aspirante a la primera magistratura estatal, pero pronto la traicionó lo que generó un exacerbado encono, mismo que motivó a Vitela impedir que Castañeda fuera candidato a presidente municipal, no obstante le significada mayores posibilidades de sumarle votos a su propia campaña. Al frustrarse al síndico ser candidato, y ya con una curul federal, prefirió dejar la Cámara de Diputados para reclamar su sindicatura para desde allí seguir torpedeando al proyecto de Marina.
Con todos estos frentes las campañas de Vitela y Martínez atacaron ayer a los aliancistas, quienes reviraron acusando que los incendios fueron autoinflingidos intentando llamar la atención porque según ellos, los de Morena van abajo en las encuestas (el mismo argumento aducen los morenistas, que los de la alianza van abajo) incluso señalan que miente Marina Vitela al tratar de columpiarse del proyecto Agua Futura para La Laguna, ya que dicen que esos planes vienen de años atrás.
Más allá de los dimes y diretes, sorprende el nivel de rispidez que se está viviendo en estas campañas duranguenses. Es inédito que se señale particularmente como violento al equipo de campaña de Leticia Herrara, una empresaria política perteneciente a una familia muy relevante que pocos en los años desafían abiertamente. Quizá lo cerrado de la contienda hace que así esté el clima político o que los de Morena locales creen que la federación realmente los respalda para atreverse a tomar las actitudes que están teniendo. Habrá que observar qué derrotero toman estás candentes campañas.