Foto: SERGIO A. RODRÍGUEZ / EL SIGLO COAHUILA
Cumpliendo con la tradición, la comunidad católica celebró este día el Domingo de Ramos, recordando la llegada de Jesús a Jerusalén.
La tradición señala que a la llegada de Jesús, aclamado como hijo de Dios, el pueblo lo recibió con hojas de palma que fue poniendo en su camino mientras el mesías entraba a la ciudad montado en un asno.

La grey católica se desbordó en los principales templos de Monclova con ramos de palma y de hojas de laurel con estampas religiosas para que fueran bendecidas por el sacerdote.
En el exterior de las iglesias comerciantes ofrecían los productos para su bendición a un costo promedio de 50 pesos.

Esta tradición nació luego de dos mil años de la llegada de Jesús a Jerusalén, pueblo hebreo de Oriente medio, según los escritos en los cuatro evangelios de la Biblia cristiana.
Jóvenes, adultos, pero principalmente personas mayores se personaron en las iglesias para buscar la bendición de sus hojas de palma y laurel.
