El deporte conlleva en su mayoría un ánimo competitivo, hay diferentes explicaciones para el origen de los Juegos Olímpicos, la justa deportiva más identificada, desde la competencia en que Zeus vence a Cronos, la de Heracles que reta a sus hermanos a una carrera obteniendo como premio una corona de olivo, hubo otras competencias consideradas como olímpicas, los juegos Píticos en honor Apolo, los Ístmicos en honor a Poseidón, los Nemeos celebrados en honor a Zeus, en todos estos participaban ciudadanos libres excluyendo a extranjeros. Es hasta la era moderna en el año de 1896 quedes que después de una larga pausa se reanuda la tradición de estos juegos con 9 disciplinas en el que se incluyeron a otros países dando un carácter internacional pero que excluían la participación femenina, las disputas políticas han afectado a lo largo de su historia como resultado del momento histórico con exclusión de género y racista y en algunos casos negando la participación de alguna nación o bien una de estas retirándose en forma voluntaria de las mismas, la situación se vuelve a presentar como resultado de la guerra entre Rusia y Ucrania que ha ocasionado que el Comité Olímpico y otras asociaciones como la FIFA y la UEFA entre otras excluyan a los rusos de su participación o bien retirando eventos como la final de la Champions a celebrarse en Moscú.
Pero no veamos solo hacia afuera, en nuestro medio las escenas del terrible momento vivido en el Estadio de la Corregidora nos hacen reflexionar cuanto se ha distorsionado el aspecto de la competencia desviándose hacia otros fines y sirviendo como excusa para delinquir, las escenas repito por momentos nos llevaron al pensamiento de una barbarie en la que no solo era golpear era hacer un verdadero daño como el que seguramente hicieron en la mente de los pequeños y demás personas que vivieron el momento, promovamos el deporte en cualquier ámbito como un sitio de unión para las familias con un entorno de una competencia sana, aplaudo las iniciativas del club Guadalajara que invito a los asistentes al clásico nacional a vestir de blanco en sus tribunas, fue un clásico diferente en el que aun con esa invitación varios aficionados asistieron portando con orgullo y cariño sus colores sin que hubiera disturbios, bien por esos aficionados de verdad que asisten para apoyar y disfrutar al equipo de su preferencia y sobre todo de un espectáculo al que puedan acudir las familias.
Y en algo para aplaudir es la tremenda racha de Los Alacranes de Durango que militan en la segunda división A manteniéndose invicto en su casa por más de 28 jornadas consecutivas y con la mira puesta en refrendar su título, bien por Ciro Castillo que encabeza su directiva y que ha puesto empeño y dedicación en hacer crecer a su club. ¡Hasta la próxima!
