Se titula Chin Chin, y se trata de una pieza móvil realizada de cerámica (CORTESÍA)
Dentro de la primera edición de Coyote Art Week, un festival artístico multirregional que se inauguró en Torreón el pasado 29 de noviembre y que concluirá mañana tres de diciembre, la artista lagunera Laura Siga expone su obra Chin Chin la Matanza de los Chinos, que aún se puede visitar dentro de la habitación 42 del Hotel Galicia ubicado en el centro histórico del municipio.
En el sitio oficial de Coyore Art Week se explica, que el festival nació para impulsar una actividad que celebrara la historia y el arte en la Comarca Lagunera mediante un evento multigeneracional con exposiciones, conferencias, subastas, y más, que promovieran el talento local, la participación ciudadana y la reactivación del centro de Torreón. En esta, su primera edición, el evento contó con la presencia de cinco artistas Internacionales y tuvo como estado invitado a Yucatán.
Laura Siga, es parte talento lagunero que fue convocada a este festival por su facultad para manejar la ceramica. Es arquitecta y artista plástica ceramista en gran formato. Entre sus títulos se encuentra el de ser la fundadora de la Casa Sigart, la escuela más grande de cerámica de La Laguna.
Cabe mencionar que la lagunera cuenta con diversas exposiciones colectivas e individuales, su obra expone en base al color y el trazo libre en el folclor, cultura y naturaleza mexicana tanto en obra pictórica como en la cerámica.
SOBRE LA OBRA
Siga la tituló Chin Chin, y se trata de una pieza móvil realizada de cerámica que juega con luces y sombras proyectadas en la pared sobre un dragón tren que proyecta la llegada migratoria de los chinos a La Laguna a través del ferrocarril.
La comunidad fue masacrada por el mismo pueblo, que la artista lagunera trató de representar sobre un juego de jarrones de diferentes que simbolizan a las diferentes clases sociales que estuvieron involucradas en este acontecimiento.
El largo recorrido del numeroso grupo de chinos que huyeron de su país, encontró un lugar en esta tierra, un almiar cosmopolita y donde el proletariado encontraba también su identidad nacionalista.
"Estos son los rostros que incomodaron a una sociedad incompartida de clase con aquellos que segrega, y que con su poder vigente de señalar con un dedo, gestaron un contubernio contra una comunidad pacífica. Podría ser predecible, pero en realidad es difícil saber lo que frente a frente víctima y victimario meditaron ese día. ¿En poco más de cien años seguirá errante y cíclica la historia en nuestro país? O podremos reformar ese futuro que nos sitúa en el reiterado presente del suceso anticipado", explicó la artista sobre su intervención.
