(ERICK SOTOMAYOR)
Su obra es una invitación a reflexionar sobre la cotidianidad laboral y la explotación a la que son sometidos los trabajadores en el país. Inició con una hibridación de gráfica y performance, donde la idea era llevar a la gráfica hacia nuevos niveles del lenguaje.
Francisco Javier García Leyva inauguró la noche de este miércoles 23 de noviembre su exposición Estampa laboral. La ceremonia tuvo lugar en el Museo de la Moneda, donde la muestra permanecerá hasta febrero de 2023.
“Empezó con estos martillos, estampar sobre el muro, crear un dispositivo de impresión y esto ya me llevó al tema de lo laboral”, compartió el artista en entrevista.
Sus propuestas representan la explotación, las consecuencias de la pandemia en el mundo laboral, la inflación, y lo que experimenta un artista visual respecto a la manutención de su proceso creativo. A través de su discurso y estética, el creador intenta reflejar esas emociones por medio de la gráfica, pero también con la intención de protestar contra los sistemas económicos que no se modifican.
“La idea es que la gente tome puntos de reflexión, que empatice con todas estas cuestiones que uno va aconteciendo y lo invite a un mejor accionar, a reflexionar de otra manera. Aunque no sé si se logre eso al respecto, pero al menos la intención es compartirlo”.
Estampa laboral se compone de una decena de obras y se planea ampliarla próximamente. Entre las propuestas se puede encontrar objetos de la cotidianidad laboral como boletos de autobuses, solicitudes de empleo, alegorías a los medidores de luz y guiños a los gastos de la canasta básica que en muchas ocasiones no pueden ser cubiertos por el individuo. Todas las obras se abordan desde la colectividad.

Un ejemplo es Residuos laborales, compuesta por una serie de martillos que representan el desgaste laboral del trabajador, no tanto como un residuo tóxico, sino emocional.