(CORTESÍA)
La reforma energética, que finalmente no fue aprobada por el Congreso de la Unión, contenía cláusulas que amagaban a las energías limpias, pero “nacionalizó” el litio, producto con el que se fabrican las baterías y pilas recargables.
Eso fue señalado por Ricardo López Valdéz, expresidente del Colegio de Contadores Públicos de Coahuila, quien dijo ser respetuoso de la decisión de los legisladores federales, pero cuestionó el por qué buscan reservar en exclusividad, como si se tratara de un monopolio exclusivo del gobierno, el mineral de litio.
Explicó que la reforma energética castigaba fuertemente el uso de las energías limpias, pero consideró que no era con la intención de frenarlas, sino de impedir que inversionistas extranjeros se beneficiaron económicamente en México con éstas.

Expuso que esto explicaría por qué el gobierno pretende manejar de manera exclusiva el litio, cuyas reservas en México representan un crecimiento económico exponencial por su alta demanda en el mundo.
López Valdéz señaló que cuando el gobierno se hace cargo de las empresas y las convierte en para estatales y monopólicas, el resultado es invariablemente pérdida de recursos, corrupción y saqueo.
Consideró que por eso no debería hacerse cargo del gobierno de la extracción y exportación del mineral estratégico para la creación de baterías recargables.
Las baterías de litio son utilizadas en los sistemas de energías limpias como paneles solares y granjas eólicas; son pilas que guardan la electricidad generada por estos sistemas no contaminantes.