Hoy en Pachuca surgirá el campeón del Clausura 2022, increíblemente el Atlas tuvo que esperar setenta años para su segunda liga, ahora le puede tomar seis meses ganar su tercera. La paciencia y el trabajo de Grupo Orlegi que adquirió a los Rojinegros en 2019 ha dado extraordinarios resultados solo dos años y medio después. Quizás no sea la academia donde movía los hilos Pepe Delgado o aquel deslumbrante equipo de La Volpe, pero esta versión de Cocca es el equilibrio perfecto, este Atlas encajaría en la Serie A, orden espartano en defensa y ataque con poca gente pero sumamente capaz.
El trabajo de Diego Cocca admirable al resucitar a futbolistas como Nervo y Abella que se han convertido en piezas clave de la defensa tapatía.
Adelante el dúo ideal, el nueve Julio Furch como un poste de NBA, recibiendo el castigo, codazos, rodillazos, jugando de espalda resistiendo para los que llegue de frente su socio, el colombiano Julián Quiñones que está on fire y en plenitud física, el gol que hizo al 93' en la ida fue la clara demostración que anda sobrado, después de un fragoroso combate de una intensidad bárbara, todavía muestra una ambición ejemplar, se da cuenta de que el chavo Aceves apenas pude controlar el balón y se lanza como un depredador despoja al #195 y luego vence la tibia barrida de Tapias para encarar a Ustari y vencerlo con zurdazo autoritario.
Gol que adelanta al rojinegro y lo pone en el umbral del título, hoy la defensa tuza sabe que no basta marcar a Quiñones hombre a hombre, la doble cobertura como mínimo para evitar que te liquide y liquide la final.
Tuvieron que pasar 64 torneos para que se enfrentarán en una final, el número uno contra el campeón vigente, los Tuzos de Guillermo Almada, que ganaron catorce juegos y dominaron la Liga de pe a pa. Hoy apelaran a su fortaleza, ubicada en el Hidalgo donde no pierden desde hace ocho meses, el asunto es que incluso puede ganar por un gol y tener que ver coronarse a la academia.
Pocas veces se vive una ida tan buena como la que gozamos el pasado jueves y dada las circunstancias todo parece indicar que hoy estaremos al borde del asiento y sin perder ni un solo instante en la vuelta. ¿Podrá Guillermo Almada sustentar su idea de futbol en su quinta liguilla con un título? Le acusan de "no saber dirigir" finales pero la verdad es que el uruguayo no distingue entre la jornada seis y una final, plantea sus partidos siempre para ganar, les pide a sus futbolistas que tengan siempre como objetivo el llegar lo más cerca posible al arco rival para intentar definir la mayoría de las oportunidades, el problema de este tipo de sistema, es qué si los ofensivos salen en una mala noche, fallan y entonces dejan colgada a la defensa y lo vacunan, como ese doloroso segundo gol de Atlas que dejó aturdido y contra las cuerdas a los Tuzos.
¿Cocca mandará a sus jugadores a noquear con un gol tempranero? ¿O cederle el medio campo a los Tuzos y contragolpearlos? Me parece que lo segundo sería un error, Pachuca en su casa abruma y ataca incesantemente hasta derrumbar las barreras y terminar sentenciando el partido. Lo ideal para los Rojinegros es hacer un gol y dejar al Pachuca como salmón a contra corriente y en territorio de osos hambrientos. Es decir, si vas a especular que sea ya con la ventaja de tres goles.
En lo personal me gustaría que Almada consiga su primer título en México, sería una recompensa para su manera de concebir el juego, en una época donde ser mezquino y cuidar la chamba a base de evitar perder y no buscar ganar, podría ser un ejemplo que arriesgando el todo por el todo también te puede redituar en campeonatos. Segunda final consecutiva entre los grupos Pachuca y Orlegi, la anterior la ganó Orlegi con Atlas doblando a la fiera.
Ahora para Orlegi será su tercera final en fila, Santos y dos veces Atlas. Para el Grupo Pachuca será su tercera final en cuatro torneos, León dos veces y ahora Pachuca. Como dijo Ricardo Salinas Pliego: "los únicos que le saben a este asunto ganando dinero, son Alejandro Irarragorri y Jesús Martínez".
