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El jardinero cubano de los Astros de Houston, Yordan Álvarez, comenzó a sentirse mal el viernes en pleno juego ante los Bravos de Atlanta y tuvo que abandonar el encuentro, que terminó perdiendo Houston 6-2. El patrullero fue transportado a un hospital local, luego de ser evaluado en el vestuario.
Sin embargo, el club anunció este sábado que todas las pruebas arrojaron resultados normales. Álvarez está presente en el estadio para el segundo juego de la serie ante los Bravos, pero luego se someterá a pruebas adicionales. El cañonero salió del juego del viernes debido a respiraciones cortas y fue él quien tomó la decisión de salir del compromiso. Los Astros no sabían que tenían que sustituirlo hasta que Álvarez entró en la cueva.
“Tenía respiraciones cortas”, mencionó el manager Dusty Baker el viernes. “Luego, cuando dispararon los fuegos artificiales, el humo lo empeoró. Qué bueno que lo sacamos porque cuando estaba en el dugout nos asustamos. Pudo haber sido cualquier cosa. Pero está bien por ahora”. Álvarez, de 25 años, ha sido parte fundamental en el éxito de los Astros este año. Ha disputado 40 juegos en el jardín izquierdo y 61 como bateador designado.
El zurdo ha atormentado a los lanzadores contrarios desde que debutó en las Mayores en el 2019.
