(EFE)
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, visitó la ExHacienda de Guadalupe para celebrar el Día del Ejército. Durante el evento se indicó que en esta administración se han asignado nuevas tareas, como control migratorio, construcción de obras y seguridad pública. Y en su discurso el mandatario negó que el país se militarice.
Por el contrario, con las nuevas atribuciones, considera que se deja de lado la desconfianza entre civiles y militares que se generó "por las decisiones erróneas y perversas de Gobiernos civiles". Pidió a la ciudadanía confiar en el Ejército. "No encarguemos la culpa al Ejército de acciones indebidas que avergüenzan, que son manchas de nuestra historia. No se olvide que esas acciones fueron ordenadas por las autoridades civiles".
Durante su discurso también hizo referencia a la polémica mediática por la que atraviesa. Indicó que existe una estrategia golpista mediante el uso de los medios de información que, aseguró, "se venden o se alquilan", pero que no lo han logrado derrotar. "En expresión de (Benito) Juárez, 'no le quitan ni una pluma a nuestro gallo'".
En reiteradas ocasiones el mandatario recalcó que para un poder político dispuesto a transformar no hay mejor aliado que el propio pueblo.
"Como sostengo siempre, el soldado es pueblo uniformado y por eso nunca traicionará a su gente y siempre será un defensor leal de la libertad, la justicia, la democracia y la soberanía nacional".
López Obrador dijo que al inicio de su gobierno se estableció en la Estrategia Nacional de Seguridad Pública la necesidad de reorientar a las Fuerzas Armadas y agregar a sus misiones constitucionales tradicionales la "de participar en la construcción de la paz, particularmente con la creación de la Guardia Nacional". A lo largo del país se cuenta con 250 cuarteles, lo que aseguró "no se había hecho durante mucho tiempo para garantizar la seguridad de todos los mexicanos". Y negó que el país se esté militarizando. Argumentó que estas acusaciones carecen de toda lógica y la más elemental buena fe.
"No se ha ordenado a las Fuerzas Armadas que hagan la guerra a nadie, no se les ha pedido que vigilen u opriman a la sociedad, que violen las leyes, que coarten las libertades y, mucho menos, que se involucren en acciones represivas o violatorias de los derechos humanos".
Por su parte, el gobernador Miguel Riquelme Solís agradeció la distinción que se hizo de la entidad al ser elegida para la celebración del Día del Ejército y en este contexto expresó su gratitud al trabajo del Ejército y la Marina, porque gracias al esfuerzo coordinado, resaltó, "nuestras ciudades salieron de la lista de ciudades inseguras y se logró que las familias volvieran tranquilamente a las calles, las carreteras volvieron a ser transitadas por el comercio y el turismo".
