
Se unen familiares de personas desaparecidas y de las víctimas de feminicidio en peregrinación.
Por segundo año consecutivo, los grupos de familiares de personas desaparecidas y de víctimas de feminicidio, se unieron para llevar a cabo su peregrinación a la Virgen de Guadalupe, movilización que además de una muestra de devoción, buscaban hacer visible la problemática que se vive en México y también, la solidaridad y cercanía de la sociedad y que sean más "los que clamen justicia".
Acompañados por elementos de Vialidad del Municipio de Torreón, el pequeño grupo de colectivos salió poco después de las 10:00 horas de la Alameda Zaragoza rumbo al Templo Guadalupano, por la avenida Juárez en el sector poniente de Torreón.
Con vehículos forrados con las fichas de búsqueda de sus familiares y con grande lonas con los rostros de las víctimas de feminicidio y otros más con banderines para identificar a cada grupo, fue como peregrinaron los colectivos.
Fue el sacerdote católico Édgar Sánchez Beltrán, del ejido Luchanas, municipio de San Pedro, el que encabezó la movilización, acompañado por otros sacerdotes y religiosas que se mantienen cercanos a las familias.
En esta ocasión, el obispo de la Diócesis de Torreón, Luis Martín Barraza Beltrán, no acompañó a las familias.
PARTICIPANTES
Los grupos que nuevamente se unieron en esta muestra de devoción a la Virgen Morena fueron: Grupo Vida, Funndec-Fundem (Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila); Voz que clama justicia por nuestros Desaparecidos; Caravana Internacional de Búsqueda; Búscame y Rastreadoras Nacionales (Ranades). También, participó el grupo de Madres Poderosas, que congrega a familias de las víctimas de feminicidio.
Se trata de la Caravana de los Colectivos que Buscan Justicia, dijo el sacerdote católico.
"Lamentablemente existe esta realidad de nuestro país, son más de 100 mil desaparecidos que hay en nuestra nación, las familias de las víctimas de feminicidio, aquí son más de 21 personas, por lo menos las que se tienen registradas, entonces es muy importante para hacer visible, el acompañar a estas víctimas", dijo el sacerdote.
Se trata de una de varias actividades en las que la iglesia acompaña a estos grupos, a fin de mantener la fe y la esperanza, de lograr que sus familiares aparezcan y que se haga justicia en el caso de los feminicidios.
"Hacer una invitación a la sociedad porque como dicen algunas de las mujeres, de las madres, es una situación que a cualquiera le puede pasar en nuestro país, no estamos exentos y entre más seamos, más personas, y que podamos expresar nuestra solidaridad y cercanía, más se escuchará la voz que clama justicia a las autoridades, que se haga lo necesario para encontrar a los desaparecidos y para que se haga justicia, entonces invitar a la sociedad en general. Ojalá y estos fenómenos no existieran pero existen y entre más seamos, más fuerte se hace el clamor de la gente. Aquí estamos".
