Los habitantes acuden al río para monitorear la llegada del agua y evitar una tragedia.
Mientras que para algunos la llegada del padre Nazas a la región ha sido todo un espectáculo, hay quienes temen que ocurra una tragedia como la del 2016.
Durante todo el día del domingo, vecinos del poblado Hormiguero acudieron constantemente al lecho seco del río con la finalidad de estar monitoreando.
La mayoría de los pobladores están preocupados y tienen miedo, ya que recuerdan que la última vez el agua provocó el desalojo de muchos habitantes de la parte baja del ejido.
Además, señalan que hasta la tarde de ayer, ninguna dependencia del gobierno o autoridad se acercó para ofrecer el apoyo, ni siquiera para informar si corren el riesgo de alguna inundación o contingencia como la que ya se ha presentado en otros ejidos del mismo municipio.
PREOCUPACIÓN
"Estamos preocupadas porque hay pozos y no han venido a reforzar bordos ni a poner costales", explicó una mujer que caminaba de regreso a su vivienda, luego de verificar que el agua aún no se encontraba en el territorio.
Aseguraron que los habitantes prefieren revisar por ellos mismos para dar aviso a toda la población y realizar un plan, en caso de que sigan incrementando el flujo del agua desde la presa, "la vez pasada nos evacuaron, no perdimos nada porque las mismas personas anduvieron trabajando, reforzando los bordos y ahí se quedaban, les traían almuerzo, comida y cena, fue por eso que pudieron controlar el cauce y evitar un desbordamiento", así lo recordaron.
Esperan que igual que en 2016, sean los hombres del Hormiguero quienes les "den una vuelta al río", para comprobar si ya llegó, ya que decían que el agua iba a llegar desde la tarde del domingo, "es que todo el día han estado pasando y ver cuanta cantidad de agua para empezar a juntar a los vecinos".
En agosto de hace seis años, durante la madrugada ocurrió lo mismo, vecinos se turnaron para ir a checar que el agua ya hubiera llegado, "lo malo es que esa vez el agua agarró a uno solo, él tuvo que avisarle a todos los demás, fue como a las 03:00 de la mañana que vocearon que el agua ya había llegado, como estaba solo tuvo que correr por todo el rancho para avisarnos y fue cuando todos se juntaron para poder actuar rápido", manifestó Jonathan Pérez Ortíz, quien también acudió junto a su familia para presenciar la llegada del agua al lecho seco.
Sin embargo, hay otros problemas, el río divide la comunidad del Cuije y el Hormiguero, por lo que el regreso del padre Nazas bloquearía el acceso de este paso, el cual les facilita a algunos estudiantes llegar a sus escuelas, "pues los que van a la prepa, entre ellos mi hermana, van a tener que agarrar el camión que hace más camino y les cuesta, y aunque llegue mucha o poca, definitivamente ya no podrán cruzar por el río como siempre lo hacen", detalló una mujer.
Aún así esperan que esta vez las autoridades acudan para presentar un apoyo a la comunidad.
