Un platillo típico del sur de México se convirtió en la principal polémica que encubre a bien esta separación o segregación que estratégicamente ha hecho el presidente Andrés Manuel López Obrador: 'fifís' vs. 'chairos'. Las redes sociales, las pláticas de café y hasta en escenarios laborales se centraron una vez más en un tema mediático como las tlayudas en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. Los 'fifís' ven esta intervención de la informalidad gastronómica como algo poco adecuado para un aeropuerto internacional y los 'chairos' festejaron la venta de esta comida típica como un avance para 'dar a conocer la gastronomía mexicana al mundo'.
Lejos de sumar, esta discusión deja entrever que una vez más se cae en una discusión sin fondo ni forma, sin fundamento y sin dirección, pero sirve precisamente para esconder los temas cruciales de los que nadie quiere hablar: las deudas en las tarjetas de crédito, el incremento del flujo migratorio, feminicidios, los problemas de abastecimiento de agua, el crecimiento en el consumo de 'cristal' en los jóvenes laguneros, el incremento en el precio de la tortilla y de otros productos de canasta básica, el freno en las inversiones, la costos de la guerra en Ucrania o hasta la 'barbarie' de pronunciarse a favor de un bando en un conflicto bélico al otro lado del mundo…
Sin embargo, como todo proceso de reflexión, llegamos a un punto en el que no existe nada más que eso, una simple discusión sin fondo. Y fue el jueves precisamente cuando en una conferencia mañanera el presidente López Obrador 'adelantó' el rumbo que tomará la tasa de interés, una decisión autónoma del Banco de México, cuando la discusión y el análisis toma fondo y forma: ¿El Banco de México, quien dicta la política monetaria del país, dejó de ser autónomo? La autonomía del Banco de México lleva 25 años, cuando se determinó unos meses antes de la desastrosa crisis económica de 1995 dotar de facultades al Banco Central para hacer uso de los instrumentos monetarios (como es la tasa de interés) para garantizar el control inflacionario y fortalecer el poder adquisitivo de la moneda nacional, parte del 'modelo neoliberal' tan criticado por el actual presidente de la república. En estas dos décadas la inflación (crecimiento de los precios) ha mantenido cierta estabilidad ante el eficiente manejo del autónomo Banco de México. Es así que este anuncio 'adelantado' de López Obrador devela un rumbo claro en el manejo de la política económica.
En la Convención Bancaria, que arrancó el mismo jueves, el presidente reconoció un error. Aceptó el error de haber violado la Ley del Banco de México al adelantar el incremento en la tasa de interés al 6.5 por ciento. Aun con el reconocimiento del error, el mandatario pone en entredicho la valiosa autonomía del Banco Central. Lejos de ayudar, las tlayudas del lunes se convirtieron en la punta de lanza para señalar que tal vez, solo tal vez, ya estamos conociendo el rumbo que tiene la 4T.
