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Tomás Ledesma

Torreón distingue al artista Tomás Ledesma con la medalla Magdalena Mondragón

Desde muy joven trazó sus inicios en agencias de publicidad

(EDUARDO RUIZ)

(EDUARDO RUIZ)

SAÚL RODRÍGUEZ

“Tú vas a ser pintor”, le dijo la directora de la Escuela Felipe Carrillo Puerto cuando recién salió de sexto año. La docente no se equivocó, Tomás Ledesma Fuentes (Torreón, 1940) cargaba ya grandes volúmenes de talento y cualidades en su mochila.

Desde muy joven trazó sus inicios en agencias de publicidad torreonenses. En ellas realizó carteles publicitarios que luego serían plasmados en pliegos de periódico. Así, los principales diarios de la región, incluido El Siglo, se convirtieron en una especie de galería ambulante donde pudo dar a conocer sus primeras obras.

“Trabajé en dos agencias de publicidad, dibujando anuncios para el periódico: en Norte Publicidad y en Publicidad Morelos. Norte Publicidad estaba dirigido por el señor Joaquín García Cruz y Alejandro Vilalta, un reconocido pianista de origen español. Eran las cabezas de esa agencia de publicidad donde trabajé por primera vez haciendo dibujos para los periódicos. Luego me fui a Publicidad Morelos”.

El maestro Tomás Ledesma camina hacia la escalinata tricolor del Museo Arocena. Es 15 de septiembre, Torreón cumple 115 años y se ha realizado una sesión solemne de cabildo en este recinto. El evento sirvió también para entregar las preseas de Ciudadanía Distinguida. La medalla Magdalena Mondragón de este año, destinada a personas sobresalientes en temas artísticos, le pertenece al maestro Tomás. El pintor trajeado va a paso lento, pero seguro. Apoya en el bastón todo el peso de su trayectoria y entre aplausos recibe el reconocimiento de manos del alcalde.

De joven, el maestro quería estudiar pintura. Así que empacó las ropas de sus mejores sueños y tomó camino rumbo a Ciudad de México. Su destino sería la Academia San Carlos, esa legendaria institución que se vincula a maestros de la talla de Diego Rivera, José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros y Rufino Tamayo, entre otros.

Ledesma llegó a la capital del país, sosteniendo en sus manos un anuncio de periódico que había diseñado para un supermercado lagunero. Era 1965. El anuncio mostraba a un Santa Claus inspirado en un personaje del centro de Torreón: Don Pioquinto, “un anciano medio sordo que tenía un cuerno para escuchar y decía: ‘¿Qué? ¿Qué? ¿Qué?’. Entonces lo dibujé de Santa Claus, con su cuernito, sentado en el trineo, en el carrito jalado por los animalitos y volando en el espacio”.

En ocasiones, el maestro frena su testimonio y luego se esfuerza para retomar los recuerdos que iluminan sus ojos tras el cristal de las gafas. Ha tomado asiento para la entrevista. Lo acompaña su familia y recibe felicitaciones. Incluso se toma fotografías con algunos de sus conocidos. El día es dedicado a él y confiesa que, por las prisas de llegar al evento, no alcanzó a almorzar.

Aquel anuncio inspirado en Don Pioquinto fungió como su carta de presentación en Ciudad de México. Gracias a él consiguió trabajo en una agencia de publicidad, donde fue titular y con la conveniencia de tener que trabajar sólo en las mañanas, pues de cuatro de la tarde a ocho de la noche tenía que estudiar en San Carlos.

“Yo vivía cerca del Monumento a la Revolución y la agencia de publicidad estaba por la Insurgentes. ¡Eran mis rumbos! Y la escuela estaba atrás del Palacio Nacional. El tranvía me dejaba a una cuadra. Esa es parte de mi historia cuando llegué a México, a San Carlos”.

Más adelante, no cabía ninguna duda sobre su talento pictórico. El arte lo llevó a exponer obra incluso en Europa. En 1998 obtuvo el Premio Firenze gracias a su obra El hombre caracol, la cual es una de sus favoritas y actualmente es exhibida en la Galería del Teatro Isauro Martínez (TIM).

“Ahorita está ahí un cuadro que fue muy importante para mí, porque yo partícipe en un concurso internacional que se llevó a cabo en París, Francia. Ese cuadro fue primero la portada de un libro que yo diseñé allá en México, trabajando en la UNAM”.

En 1989, el maestro Ledesma entró al área de Difusión Cultural de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC). Esta institución lo reconoció en 2021.

Tras la ceremonia, el maestro compartió unas últimas palabras al ser reconocido con la medalla Magdalena Mondragón.

“Me siento muy contento por esta distinción […] Torreón es mi ciudad de origen, donde de niño me desempeñé e hice todos mis estudios de primaria, secundaria y preparatoria”.

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