(FOTO: EDIE RUIZ)
Mon Laferte le cantó al amor y al desamor, pero también alzó la voz en contra de la violencia hacia las mujeres durante el concierto que dio anoche en el Coliseo Centenario.
La chilena, pero naturalizada mexicana regresó a la Comarca Lagunera tras varios años de ausencia; ofreció un espectáculo que estremeció a los miles de laguneros que se dieron cita en el lugar.
El evento contó con la participación de la cantautora lagunera, Vivir Quintana, cuya rola, Canción sin miedo, se ha vuelto un himno en las protestas feministas. Las puertas del Coliseo abrieron a las 19:30 horas. Los fans de la artista poco a poco comenzaban a llegar.
La expectativa era mucha y es que todo apuntaba a que Mon Laferte y su público local vivirían una intensa relación por más de dos horas, y así sucedió.
Mon dividió el show en varios sets, entre ellos El miedo nos ha entrenado, Se me va a quemar el corazón y Éxtasis; según ha dicho la artista, en esta gira busca producir un efecto cinematográfico y teatral, por lo que entre cada acto de rolas, aparecía un video en la pantalla en el que ella actúa.
Paulo Ortiz, de Torreón, dijo a El Siglo de Torreón que Mon, va más allá de ser una artista comercial, ya que sus letras también generan conciencia e inspiran a la libertad.
"Mon Laferte ha sido inspiración para nosotros que somos sus fans. Ella ama intensamente y nosotros también. Era justo y necesario que volviera a la Comarca", dijo.
Mientras bastantes asistentes ya ocupaban sus asientos, Vivir irrumpió a las 8:30 de la noche en el escenario para mostrar su propuesta que busca revolucionar el futuro de las mujeres en Latinoamérica y el mundo; entregó temas como Yo te espero y Al tiro.
A las 21:35 horas, Mon llegó al entarimado. El público de la Comarca la recibió con una calurosa y ensordecedora ovación.
Aunque te mueras por volver, Tormento, Inventame y Antes de ti, fueron las primeras canciones que la intérprete compartió con su audiencia.
Laferte alborotó a sus fanáticos con la aparición del actor, Alejandro Speitzer, en una cápsula del recital, en la que ambos encarnan a una pareja que discute; lo que sirvió como preámbulo del acto, El miedo nos ha entrenado, que se conformó de temas como Supermercado, Si tú me quisieras y Química mayor.
Varios espectadores ubicados en las primeras filas llevaron regalos a Mon, entre ellos; ramos de flores, dibujos y una chamarra, mismos que aceptó muy contenta.
"Buenas noches, qué bello estar aquí nuevamente. Gracias por venir, ahora vamos a bailar un poco", expresó la chilena antes de cantar Algo es mejor y Placer Hollywood.
Good Boy, tema que le compuso Mon a su pareja de nombre Joel, fue el siguiente en el "set list" y después sonaron Vuelve por favor y La mujer.
La artista sorprendió a la gente cuando subió a uno de sus fans, de nombre Humberto, al escenario. El joven la acompañó con la guitarra durante la interpretación de Cielito de abril.
El año pasado, Mon dio a conocer el disco 1940 Carmen que incluye el tema, A Crying Diamond, en donde plasma en su letra el abuso sexual que vivió cuando ella tenía 13 años, en manos de un hombre de cuatro décadas.
Anoche, Laferte cantó la rola y antes de hacerlo dijo: "Es una confesión y es algo que no debería haber vivido nunca, ni ninguna mujer ni ninguna niña deberían vivirlo nunca".
Melodías como Se me va a quemar el corazón, Amor completo, Tu falta de querer y Por qué me fui a enamorar de ti complementaron el concierto en el que Mon, además de utilizar diversos vestuarios y pelucas, mostró sus dotes de bailarina de tango.
