Cuando se dio a conocer el concierto de Uada en Torreón me pareció increíble y lo comenté con mis más allegados: "falta que se haga". La intención puede ser buena, pero en el camino, se presentan los imponderables. Ahora aquí la cosa es, ¿realmente existía la intención de traer a esta banda de Portland a La Laguna? Permíteme dudar.
En el 'flyer' promocional de la fecha que correspondía a la Comarca aparecían dos marcas productoras; con ambas estamos familiarizados aquí en la región. En lo personal, una me causaba algo de confusión. La "unión de fuerzas" hace pensar que una parte pone el recurso económico y otra, la logística; no será ni la primera ni la última vez que funcione así… mientras funcione. ¿Qué pasa si en una sociedad, una parte no cumple?
A dos días de que se llevara a cabo lo que sería una histórica presentación en la Comarca, cierro los ojos por un instante (plena tarde del 17 de mayo), al abrirlos, me encuentro que lo primero que sale en mi 'feed' es un comunicado (mal escrito) sobre la cancelación del evento. Predecible. El boletín argumenta que se vendieron muy pocos boletos en la preventa (luego, uno de los presuntos organizadores sale a decir que fueron 10) y pues así no se p… puede, ante lo que describe como una "fuerte inversión". Compartí el comunicado en mis redes y, contrario a lo que sucede cuando comparto mis columnas, llovieron comentarios de todo tipo.
No hace falta ahondar en más detalles del comunicado; si de entrada no tienes el recurso para sostener un evento que anunciaste con meses de anticipación, ¿para qué le entraste? Es lógica, ¿no? ¿O es que a estas alturas, hay organizadores que pretenden realizar eventos solo con lo que se obtenga en la preventa? Craso error. Me atrevo a dejar que mi sentido común sea el que escriba estas líneas.
Primero, en el cartel promocional, además de las firmas de las productoras también estaban logos de lo que podría pensarse son patrocinadores, los patrocinadores "sueltan" dinero, ¿no? ¿O solo adornan la imagen? Segundo, solo uno de los dos organizadores (aparentemente) le dio "promoción" con "fuerza" al evento unos días antes (tal vez haya demasiadas comillas en este texto, pero creo que ninguna sobra). Una pregunta más: ¿basta con publicidad en perfiles de Facebook para garantizar el éxito?
Estamos hablando que el evento era de "una fuerte inversión", por lo que se recurrió a un espacio amplio (viejo y arrumbado) para albergar el festín metalero, esto quiere decir que se pretendía meter a mucha gente, ¿por qué no anunciarlo en más medios? (algunos se dieron cuenta de él hasta que se canceló). Hay un desdén tremendo, de un tiempo para acá, hacia los medios tradicionales; la tecnología roba terreno y poco a poco se deja de lado lo que antes funcionaba, pero no está de más buscar ahora sí que "por todos los medios". No se trata de un evento en un barecito para 200 personas con un 'cover' de 600 pesos que bastará para cubrir los gastos (y eso quién sabe) y que la sola publicidad del lugar es suficiente para llenarlo. Segundo punto, ¿por qué pensar que habrá buena preventa de una banda que, aunque es muy buena, no es 'mainstream'? Uada no es Metallica, Kiss, Guns N' Roses y La Laguna no es una zona metropolitana como Monterrey, CDMX o Guadalajara. ¿Quién quiere engañar a quién?
Por último, ¿cómo pedirle a la gente que compre en preventa cuando en estos tiempos (y en otros más añejos) no siempre se puede cumplir lo que se promete? En mi caso, me ha pasado tres veces que no puedo asistir a conciertos para los cuales compré boletos con meses de anticipación (sí se llevaron a cabo, yo fui el que no pude). Además aquí, como en otros lados del país, no hay cultura de preventa, no para un evento "accesible" en el que puedes esperar hasta el último momento para comprar tu entrada. Hay personas que mueven horarios en el trabajo, juntan dinero, tramitan su permiso con la pareja (metaleros y todo) y no pueden saber si asistirán hasta ese día.
Lo peor que se puede hacer es culpar a la gente, al consumidor, ¿así es como se pretende motivar a la raza a asistir a eventos? La supuesta promotora de la banda señala a personas que "nunca cumplieron con ningún pago" para la realización del concierto. Uada mostró su descontento en sus propias redes.
Pongámonos serios, hagamos las cosas bien; anuncias un evento, llévalo a cabo. Se trata de una apuesta en la que se puede perder o ganar, pero siempre se aprende. Si no quieres arriesgar, mejor ni le entres. Insisto, es mi sentido común el que escribe.
Resulta decepcionante y vergonzoso que dos días antes, un evento se cancele "porque no hubo respuesta de la gente". Y qué inmadurez de querer culpar a los demás antes aceptar las propias responsabilidades. Lo peor, si alguien hubiera podido ir a Monterrey a ver a Uada, le arrebataron era posibilidad. Era demasiado bueno para ser verdad; para ir a esos conciertos, hay que viajar.
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