(AGENCIAS)
La estabilidad económica futura se construye a través de las decisiones del presente. El ahorro inteligente se convierte en el cimiento perfecto para no perjudicar la situación financiera de manera inesperada. Un colchón de seguridad es un aliado en el cumplimiento de metas y objetivos personales.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) 2021, el 67.8 por ciento de la población mexicana de 18 a 70 años tiene al menos un tipo de producto financiero formal. La creación de un fondo de emergencia ayuda a hacer frente a los gastos que surgen de imprevisto y favorecen la administración de las finanzas personales.
Los productos financieros como las cuentas de ahorro, inversiones a largo plazo o fondos de inversión, son ideales para incrementar el patrimonio.
La mejor manera de ahorrar para el futuro dependerá de los objetivos y metas a largo plazo. La individualización de los planes financieros permite un máximo aprovechamiento de las herramientas que se ofrecen.
Optar por un producto financiero para ahorrar evita la devaluación ya que, a diferencia del ahorro físico, el monto guardado no se estancará y, en cambio, aumentará la cantidad.
OTRAS VERTIENTES
El ahorro no solo es funcional ante gastos emergentes, sino también representa una oportunidad para un retiro digno. Según el sitio Ciencia UNAM, los jóvenes que habitan en México no ahorran porque no tienen ingresos. Sin embargo, una vez perciban un salario tendrán oportunidad de hacerlo.
La falta de una cultura de ahorro en México no sólo se debe a la preferencia por gastar desmedidamente en lugar de ahorrar, también influye la falta de ingresos suficientes. El 44 por ciento de la población no cuenta no un ingreso fijo y vive en pobreza, esto según cifras proporcionadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
En suma, existe una escasa educación financiera. La ENIF señala que el 40 por ciento de la población mexicana no conoce el proceso de elaboración del presupuesto y el 61 por ciento no sabe de qué manera invertir su dinero.
El hábito del ahorro debe comenzar desde temprana edad, por ello la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), elaboró guías familiar de educación financiera para primaria y secundaria, las cuales fueron atribuidas a 132 mil escuelas en todo México.